Dicha herramienta ayudaría a mejorar la eficiencia agrícola mediante sistemas de irrigación óptimos, el continuo crecimiento de los desiertos, el cambio climático y la incertidumbre de la temporada de lluvias son problemas que se superan con la instalación
de la “lluvia sólida” en la raíz de las plantas, pues la humedad permite la siembra, cosecha y sobrevivencia aún en temporada de sequía. El IPN afirmó que por cada kilogramo de esta fórmula se gelatinizan 500 litros de agua, es decir media tonelada de “lluvia sólida“.de la “lluvia sólida” en la raíz de las plantas, pues la humedad permite la siembra, cosecha y sobrevivencia aún en temporada de sequía. El IPN afirmó que por cada kilogramo de esta fórmula se gelatinizan 500 litros de agua, es decir media tonelada de “lluvia sólida“.
¿Cómo se hace y cómo sirve?
La “lluvia sólida” es creada con base en la fórmula de poli acrilato de potasio, que
permite gelatinizar los líquidos y rehidratarlos repetidas veces durante su vida útil, que va de ocho a 10 años, y está altamente probada. El especialista, egresado de la carrera de Ingeniería Química Industrial, utilizó en su proyecto una fórmula de poli acrilato de potasio (un polvo blanco similar al azúcar), al cual se adhieren las moléculas de agua para formar un gel
“Los resultados son extraordinarios porque la raíz se mantiene húmeda por dos meses y se rehidrata en repetidas ocasiones con las precipitaciones”, dice Rico, quien fundó la empresa Silos de Agua, en 2002, para comercializar el producto.
Esta tecnología consiste en el uso de una sustancia que atrapa el agua en forma de gel y la adhiere a las raíces de las plantas, lo que permite mantenerlas hidratadas. La lluvia es capturada de los techos y otros medios, posteriormente es dirigida y almacenada en recipientes de cualquier tipo; una vez que está en contenedores, se realiza el proceso de solidificación.
El agua de lluvia se adhiere al gel localizado en las raíces de las plantas y éste se humedece lo suficiente y permite aprovechar al máximo el líquido, con lo que no hay desperdicio, el agua no se filtra al subsuelo, ni se evapora. La lluvia solida se puede almacenar en costales, lo que permite su transportación hasta los lugares de difícil acceso, como montañas, donde se dificulta la entrada de una pipa de agua pero es posible enviarlo en animales de carga.
Algunas
Características de
la lluvia sólida
La lluvia solida tiene una vida útil de hasta 10 años, retiene hasta 500 veces su peso
en agua por lo que con sólo un kilo de este producto, puedes solidificar hasta 500 litros de agua de lluvia. En cultivos, por ejemplo de maíz, se utilizan únicamente 25 kilogramos de producto por hectárea, lo que significa que por hectárea se tendrían hasta 12,500 litros de agua disponible sólo para los cultivos, porque el líquido no se pierde. La lluvia solida no permite la pérdida del líquido por evaporación, se puede mantener en forma sólida dentro de costales durante meses (a la sombra) sin que se reproduzcan hongos ni bacterias.
La lluvia solida permite la siembra aunque no haya llovido. Como las plantas tienen disponible al agua durante mucho más tiempo, no sufren de estrés hídrico y pueden duplicar su tamaño y productividad. Esta es totalmente inocuo para el medio ambiente y para el hombre y cuenta con certificación para utilizarlo en siembra de productos orgánicos. Una vez que se satura de agua, el resto de ésta se infiltra al subsuelo permitiendo que los mantos acuíferos se restablezcan disminuyendo el consumo del agua. La lluvia solida reduce gastos de distribución del agua y además se utiliza para combatir incendios forestales sin arriesgar vidas, y reduciendo el agua consumida normalmente para estos propósitos.