"El gallo de oro
Admite que su pasión es el servicio, y que el buen trato a los clientes es indispensable para mantener el prestigio de la cantina. Los trabajadores que son indispensables para el buen funcionamiento de la cantina deben de contar con algunos requisitos: buena presentación, honestidad, puntualidad, responsabilidad, experiencia en el ramo”.
de Oro''
De 1874 a la fecha, más de 100 años de historia
La historia de esta cantina comenzó en el año de 1874, ubicado en Venustiano Carranza 35, fue abierta al público para comenzar una trayectoria llena de éxito por lo que hoy en día sigue viva y atrae a cientos de visitantes interesados en conocer uno de los espacios de convivencia más legendarios que existen en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
El Sr. Antonio es dueño de la cantina El gallo de oro desde hace 6 años, diariamente asiste a supervisar la cantina desde las 9 de la mañana.
Tiene dos hijos Jorge de 35 años y Alejandro de 29, los cuáles también ayudan al buen manejo de este negocio. Consideran que su padre es un ejemplo a seguir. “Mis hijos siempre atienden con amabilidad a los clientes, dicen que los más importante es el servicio, esto lo aprendieron de mi” dijo Antonio.
El restaurante se caracteriza por ofrecer una amplia variedad de platillos, incluyendo las pastas, los mariscos o especialidades de temporada como los escamoles y los gusanos de maguey; sin embargo, el Gallo de Oro es reconocido por su especialidad en deliciosos cortes argentinos, entre los cuales destaca la arrachera, el churrasco, el bife de lomo y chorizo, entre otros.
Valle tiene vasta experiencia en este ramo ya que anteriormente supervisó la cantina Mancera.
Reconoce que trabajar en el centro histórico es interesante ya que las personas que frecuentan estos lugares son turistas, gente reconocida en varios gremios (política, espectáculo, etc.)
Una de las partes que más le gusta de este trabajo es que su cantina ha sido seleccionada para trabajos en cine o televisión, lo que permite que su cantina tenga mejor publicidad y por tanto sea más visitada.
Valle comenta que este lugar es idóneo para pasar un buen rato con la familia y amigos, en el fin de semana.
Aún en nuestros días, El Gallo de Oro es un lugar que responde a esa filosofía urbana de antaño y de la vieja ciudad donde la vida empieza por la tarde y concluye en la barra.
Por: Romero Sandra
Vargas Adela