A nuestro encuentro saldrá aquello que parece solo guardarse en el hogar, entre olores
cotidianos de pucheros y manos femeninas. Las tradiciones que se niegan a saberse pronto
olvidadas nos retarán a jugar, a compartir la calle como antaño, llena de alboroto y carca-
jadas.
Vista de la Plaza de San Nicolás con las intervenciones de NeSpoon y Regue