vida en tierra inerte. Es un daño no solo a la zona,
sino que al país y al planeta. Peor que proceso de
desertificación.
Amerita la reparación a propietarios de tierras
dañadas. No cabe duda que los dueños y/o des-
cendientes sufrieron lesiones enormes. Por jus-
ticia elemental debieran recibir una reparación,
aunque se procediere a descontaminar la tierra.
Es imposible la tarea de definir a los innumera-
bles culpables de los perjuicios ocasionados por
décadas. La reparación monetaria sería con cargo
fiscal.
No bastará un Plan de descontaminación de la
zona amagada. Sus habitantes merecen que se lle-
ve a efecto un Plan de Desarrollo a fin de mejorar
las condiciones ambientales, sociales, culturales,
urbanísticas y económicas.
Entre los variados aspectos a considerar es que
Quintero debe continuar con su destino turísti-
co. Sus condiciones topográficas de ausencia de
cerros altos que atrapan nubes como ocurre en
el resto del litoral de la V región, permite largas
horas de asoleamiento a diferencia de los balnea-
rios de la zona. Tiene condiciones naturales para
la práctica de diversos deportes acuáticos y náu-
ticos. Hay servicios básicos y de comercio como
pequeño centro urbano. A diferencia de balnea-
rios/ enclave que están despoblados la mayor par-
te del año. Tiene servicios gastronómicos e ins-
talaciones para hospedar turistas para temporada
alta y fines de semana. Su ubicación dentro de V
región posibilita la inclusión del balneario en cir-
cuitos turísticos si se fortalece sus atractivos y se
descontamina el área. Se justifica hacer un Plan de
Desarrollo Turístico. Algunos cursos de acción a
seguir: mejorar e implementar el equipamiento de
infraestructura para deportes acuáticos y náuticos.
Imprescindible es dotar de una alberca. Las pisci-
nas permiten un aprendizaje seguro de natación
y buceo. A lo menos una piscina de tamaño para
competencias oficiales. Todo chileno(a) debiera
saber nadar, salvo que sus condiciones de salud
se lo impida, con mayor razón los pescadores. La
natación es un deporte apto para toda edad des-
de párvulos hasta ancianos. Es difícil que un país
con un gran territorio marítimo cumpla su desti-
no geográfico con habitantes que no saben nadar,
que no aman ni respetan el mar.
Schlack N.
Un impedimento de la zona para el desarrollo
personal es la carencia de establecimientos de
educación técnico- profesional. Amerita dotar de
estos para que los jóvenes no necesiten desplazar-
se lejos de sus hogares para tener una profesión.
Entendiendo que el proceso de aprendizaje es un
proceso continuo, también los adultos del lugar
deben tener la oportunidad de adquirir nuevos co-
nocimientos y/o perfeccionarse allí.
Será necesario que un plan de concientización y
educación para adultos se aplique en las comunas
en cuestión para que entreguen residuos sólidos
domiciliarios debidamente clasificados, paralela-
mente con la enseñanza respectiva a alumnos en
todos los niveles.
La complejidad de la situación de Quintero –
Puchuncaví – Concón y alrededores debería cons-
tituir un desafío para involucrar a las universida-
des, preferentemente aquellas de la V región. Con
la participación de estudiantes de diversos niveles
y de científicos. Mejor aún si se logran convenios
y coordinación con los entes estatales que aborda-
rán la problemática que nos preocupa.
Los cursos de acción que anotamos en pro de
un ambiente menos contaminante son, obviamen-
te, aplicables a una buena parte del país. Requiere
mejor normativa legal y fundamentalmente vo-
luntad política de hacerlo.
Urge suprimir las termoeléctricas. No resulta
correcto para el país ni para el planeta que ello
esté programado al mediano plazo. Se precisa di-
señar una política maciza de energía, que apunte a
la mayor independencia de países vecinos y otros.
La energía es uno de los elementos estratégicos,
geopolíticos. Es parte de la seguridad de la nación.
Nuestra realidad geográfica permite el uso de di-
versos tipos de energía renovable. Su aplicación
reduciría al mínimo el uso de hidrocarburos y la
dependencia foránea. Ello sería factible al tener
estadistas que nos gobiernen, con fuerzas morales
como coraje, ética, voluntad e inteligencia a favor
de causas nobles, visión de futuro, amor a la pa-
tria, que no apoyen a grupos de presión con fines
egoístas ni populistas.
¡Unámonos para que cuidemos este hermoso
país y el planeta! Porque como dice un viejo dicho
chino “cuando tres hombres se ponen de acuerdo,
la tierra amarilla se transforma en oro”.
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