CUADERNOS DE BDSM - nº 22
CONSULTORIO SEXOLÓGICO KINKY:
Por Ignasi Puig Rodas
Apreciado Ignasi, soy una mujer de trentaypocos y llevo dos años con mi pareja.
Como nos aburre el sexo vainilla, vamos de vez en cuando a locales de intercambio.
El problema está en que a mí me excita ver a mi pareja como se enrolla con otra
gente pero no tanto participar de ello. A mi pareja por eso, le incomoda que yo no
participe porqué se piensa que no me gusta ir a locales de intercambio y se siente
mal, como si me estuviera poniendo los cuernos. Yo ya le he explicado muchas veces
que a mi mirar es lo que me gusta y no tanto participar. Esta situación está haciendo
que dejemos de ir a locales de intercambio. ¿Cómo le hago entender que a mí no
sólo no me molesta si no que disfruto viéndolo con otras personas? Un saludo,
T.
Respuesta:
Hola T., cuando una relación se torna abierta, como por ejemplo en la forma en lo que
lo es la vuestra, es habitual que aparezcan celos, remordimientos o sentimientos
contradictorios. Por muy convencido que un@ esté, es tan abundante el input sobre lo
sagrado de la monogamia que nos llega desde pequeños, que las situaciones vividas nos
crean dudas. A veces, estos son tan fuertes que una explicación, por sincera que sea, no
es suficiente para aplacarlos. Es necesaria una corroboración de mayor envergadura.
Hay diversas maneras para ir despejando esos sentimientos infundados, que varían en
efectividad según cada caso. Una opción es dar un refuerzo positivo a tu pareja cada vez
que tenga relaciones con otra persona mientras tú miras; y así contrarrestar los
sentimientos negativos. En otras palabras, una vez haya acabado, te le puedes acercar,
abrazarle, y decirle al oído cómo has disfrutado viéndole. O también, puedes ser tú
quien le pida de antemano, ir a locales de intercambio para que tenga sexo con terceras
personas, diciéndole que te mueres de ganas de verlo, explicándole lo mucho que te
excita. Puedes incluso, usar una narración de cómo vives tu posición de voyeur como
manera de, en la intimidad de vuestra casa, iniciar los preliminares de un acto sexual.
Como puedes ver, estos tres ejemplos son maneras de ir haciendo hincapié en que tú
también gozas, en que eres tú quién también lo desea, y que por tanto no está haciendo
él nada malo, como ponerte los cuernos.
Pag. 56
CuadernosBDSM es un proyecto sin ánimo de lucro y su distribución es libre y gratuita, sólo para PÙBLICO ADULTO.
Los artículos pertenecen a sus autores. Está prohibido modificar los textos, así como comerciar con este material.