La sociología rural ante el reto de la transdisciplina
2. Segundo momento: La rearticulación. Es cuando la especialización llega
a su límite, produciendo una recombinación de fragmentos en dominios
híbridos, del centro a la periferia. Por citar dos ejemplos, tenemos a la
Ecosociología y la Agroecología.
3. Tercer momento: La transdisciplina. Cuando la fragmentación y la
rearticulación han encontrado caminos para atender y resolver los
dilemas antes planteados para comprender desde el devenir del logos el
devenir del ser.
Las disciplinas, las subdisciplinas y los dominios híbridos (Dogan y Pahre,
1993:45) deben ser nómadas, capaces de circular, conectarse y comunicarse
mutuamente. Por tanto, las puertas de ingreso a lo realmente existente son
múltiples: Las disciplinas, las subdisciplinas o los dominios híbridos.
El tránsito de la Sociología Rural a la Agroecología es un ejemplo de estas
variadas y múltiples puertas de acceso (Sevilla Guzmán, 2006). Lo importante
no es por donde se ingresa, sino que una vez dentro se accede a la complejidad
y la complejización, de la que hay que dar cuenta de manera transdisciplinaria
(García Canclini, 1990:62).
Obstáculos para la transdisciplina
Desde las disciplinas, subdisciplinas y dominios híbridos, la construcción
de enfoques multidimensionales que presupone: Articulación, innovación,
invención, recuperación y reconceptualización, enfrenta lo contrario a lo que
se requiere, expresado en lo siguiente:
1. Comunidad científica. Suele ser heterogénea: con formación diversa en
teorías y paradigmas; pluralidad de perspectivas ideológicas; multiplicidad
de objetos de estudio y metodologías (por ejemplo: Partidarios del
modelo teórico, defensores de la evidencia empírica, apasionados de
la estadística o alérgicos a la cuantificación). También, la comunidad
científica está fragmentada y estratificada, con escasa intercomunicación
entre instituciones y especialidades.
2. Institucionalización. Las disciplinas y subdisciplinas están separadas unas
de otras, formando en muchas ocasiones feudos. Inclusive, la estructura
de nuestras universidades en divisiones, facultades, departamentos y
carreras, son un ejemplo. Respecto a los dominios híbridos, se enfrentan a
la falta de reconocimiento, a la marginación e inclusive a la intolerancia.
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