Creeper & Reaper Mar. 2014 | Page 9

superhéroes moderno, y que tampoco sería un número que en 1996 fuera subastado en 150,000 dólares; en cambio hoy en día, las pocas copias que aún existen de Action Comics #1, tienen un precio de 500,000 Dólares. Este suceso comenzó una explosión de fascinación por los comics, y su valor potencial, pasando de revistas y publicaciones literarias se convirtieron en una mina de oro para los coleccionistas y emprendedores del cómic. Durante años posteriores, caza fortunas buscaban en todas partes ejemplares que en el futuro podrían valer cientos, o miles, acaparando cada ejemplar, cada número para poder tener la posibilidad de ser dueño de un tesoro en potencia. Las grandes editoriales como Marvel y DC no se quedaron de brazos cruzados ante tal fenómeno, y comenzaron a aprovechar ese movimiento de coleccionismo, haciendo portadas variantes, las cuales se verían en menor número, además se llegó al extremo de producir portadas foliadas, que lo harían más atractivo al consumidor, y por consiguiente más raro y valioso. Este fenómeno tal vez no hizo que los ejemplares con portada foliada valieran más como se esperaba y poco a poco fue desapareciendo. Pero realmente, ¿cuál es el factor que hace que un cómic alcance las cifras que hemos visto con Action Comics #1, Detective Comics #27 o Amazing Fantasy #16? Bien, el verdadero factor en que un cómic sea valioso es por su rareza, mera y simple rareza. Recordemos que Action Comics #1 salió en 1938, una época donde solo se veía como una revista más, las cuales terminaban siendo tiradas a la basura. Después, añadamos el factor tiempo, es el que le da valor al comic, no solo por su nivel histórico, si no por el estado físico de este. Con 6