PSICOLOGÍA
VACACIONES
EN FAMILIA
LAS VACACIONES EN FAMILIA PUEDEN DESPERTAR
TIEMPOS DE REFLEXIÓN PERO PARA ELLO TAMBIÉN
HAY QUE DAR ESPACIO A LO PROPIO Y A LO
AJENO Y ALGUNAS VECES DE ESE INTERCAMBIO
EQUILIBRADO NACE UNA NUEVA EXPERIENCIA.
Los tiempos de vacaciones prometen horas de descanso,
risas, diálogos, juego y, dependiendo del destino, lugares
nuevos y sorprendentes. Las vacaciones tienen buena prensa
pero para que el encanto de ese hechizo no se rompa es ne-
cesario que cada uno de sus miembros logre comprometerse
con el bienestar del ambiente.
En las vacaciones el tiempo compartido se hace más no-
torio y muchas veces la convivencia diaria de tantas horas y
días deja al desamparo aquellas quejas o molestias que en el
correr cotidiano no se ven:
“... sabía que era maniático con el orden, pero cada vez está
peor...”,
“... Todos nos teníamos que levantar a la hora que ella/él
determinaba...”
“....era todo un descontrol, estábamos a la deriva...”
“... todas las actividades estaban a mi cargo, sino no hacía-
mos nada”.
Revisemos qué hay detrás de ese malestar que me genera
la situación, miremos un poco más allá de la queja. Hay algo
mío que yo debo registrar y aprender.
Cuando la familia extendida se suma al proyecto, la convi-
vencia puede resultar aún algo más difícil pero también puede
ser una hermosa oportunidad para conocernos más, afianzar vín-
culos, limar asperezas para hallar nuevos puntos de encuentro.
Disfrutemos el hoy, esa experiencia única e irrepetible que
nos regala la vida para ser un poco más felices.
MARIA EUGENIA CINTOLO
Licenciada en Psicología
[email protected]
Consultorio: Edificio Sky Glass II Del Viso.