Una vez que se ha completado la pintura y todos los detalles visuales han sido atendidos, el robot se desarma cuidadosamente, marcando el final de
esta etapa.
La estructura pintada será reensamblada más adelante, luego de haber aplicado los conocimientos adquiridos en programación y de haber
finalizado con éxito las pruebas y ajustes necesarios.
Esta metodología permite a los estudiantes adquirir un entendimiento completo de los aspectos mecánicos y estéticos del robot antes de introducir la programación y electrónica, estableciendo así una base sólida para su trabajo posterior.
Conociendo mi País en un Robot
Pintura y Personalización
Una vez que se ha verificado que todos los componentes están en su lugar y correctamente ensamblados, se pasa a la segunda etapa del armado: la pintura y personalización del robot. En esta fase, los estudiante tiene la libertad de elegir los colores que deseen para pintar el chasis, lo que añade un toque personal y único a cada robot. Además de la parte estética, esta actividad también sirve para consolidar el sentimiento de propiedad sobre el proyecto y fortalecer el sentido de pertenencia al equipo.