Antes de la expulsión que sufrieron los judíos sefaradíes en 1492, habían coexistido pacíficamente en España con cristianos y musulmanes durante siglos. Los judíos estaban organizados como una familia, pero como fueron creciendo su forma de organizarse no funcionaba como debía, por eso crearon asociaciones especiales, sociedades o divisiones de “enterradores”, “vigilia nocturna”, “los que veían por la justicia” y “los que hacen caridad”. Al vivir entre cristianos y árabes, contribuyeron con una muy grande aportación a la cultura hispánica, ya que no solo fueron sólo aceptados o tolerados en la España cristiana, sino también apoyados en el desarrollo de su cultura.
Después de la expulsión que sufrieron los judíos en España durante 1492, comenzaron a establecerse principalmente en el norte de África, los estados cercanos a Portugal, el reino de Navarra o los estados italianos. Tras cinco años también fueron expulsados de los reinos de Portugal y Navarra, de ahí se fueron al reino de Fez en África en el cual sufrieron todo tipos de maltratos y les fueron arrebatadas todas sus pertenencias incluso por los judíos que vivían ahí desde antes de que llegaran. A los que les fue mejor fue a los que llegaron al territorio del Imperio Otomano (Norte de África, Medio Oriente y Europa Oriental), uno de cuyos “mejores gobernantes” fue el sultán Bayaceto II, quien ordenó en todo su imperio que los trataran bien.
A los judíos expulsados de España se les siguió conociendo hasta nuestros días como “sefardíes” ya que continúan con la mayoría de sus costumbres y además conservaron el idioma ladino.
La cultura sefardí: los judíos en españa antes y después de la expulsión (2017). Madregot.com. recuperado el 31 de enero del 2017 de: http://www.madregot .com/sefarad.htm#VIDA DE LOS JUDÍOS EN LA ESPAÑA ANTES DE LA EXPULSIÓN
Después que partieron: la diáspora judía tras la expulsión de España