Comunion Revista Comunion nº 16 - 2012 | Page 8

El padre Juan se ha hecho peruano con los peruanos

Pero la guinda de la torta estaba reservada para la noche. De un modo sorpresivo e inesperado laicos y religiosas se hicieron presentes en la misa de siete de agradecimiento al padre Juan por sus 80 años y a Santiago Cantón por los 32 de su ordenación y despedida de Lima. Ambos agradecieron a la gente por sus detalles y acogida. Seguidamente en el auditorio se pasó una presentación de diapositivas powerpoint de la vida y obra del padre Juan Martínez en las que de modo virtual se hicieron presentes con sus saludos su hermano Ramón y cuñada, el Vicario, P. José Miguel, las Trinitarias de clausura de Lima y hasta el mismo Padre Provincial. Y sin exagerar la Parroquia de Trinidad tiró la casa por la ventana y hasta hubo torta, baile, cohetes y mariachis mexicanos. Como otro Pablo que se hizo judío con los judíos y griego con los griegos, el mismo padre Juan se ha hecho peruano con los peruanos. Realmente se le veía a Juan contento y feliz de haber cumplido 80 años con esta su familia de la comunidad y de la parroquia de Lima.

El P. Juan Martínez, aquel buen profesor de Biblia que por los años 60 del siglo pasado andaba por Córdoba enseñando a muchos trinitarios de los que hoy tienen sesenta y setenta años, sigue “firme y adelante”. Anda con buena salud, hombre orante, reflexivo, confesor que ha sustituido en el confesonario al Padre Rafael,

Celebración de los 80 años del P. Juan Martínez

Contemplando y abriendo la carta que ha recibido en Lima del secretario provincial felicitándole a nombre del padre Provincial por sus 80 años, el P. Juan sonríe y comenta: “Esta es la verdadera felicitación la que llega de modo tradicional por correo, la de Internet está bien pero es más impersonal”.

Con una sonrisa en su cara que refleja una vida feliz y sabía vivida con intensidad en el Señor, el P. Juan Martínez ha pasado el día de su cumpleaños dando gracias a Dios, a su familia y especialmente a la Orden por estos 80 años que hoy ha cumplido. Comenzó rezando las laúdes con su comunidad, seguidamente marchó a las Trinitarias de clausura a celebrar la misa de agradecimiento por los 80 años. Allí las hermanas agradecieron a Dios Trinidad y a su buen padrecito, P. Juan Martínez, por tanta ayuda espiritual ofrecida por su persona en retiros, charlas y ejercicios espirituales.

En el almuerzo con los últimos restos del rico jamón serrano que nos trajo Catalino de España acompañado de un rico champagne, brindamos la comunidad por esos bien llevados 80 años del padre Juan Martínez. Un moderno radio-casette con CD para escuchar música religiosa, un libro sobre el sacerdote y una estola trinitaria, fueron los regalos ofrecidos por la comunidad y postulantes de Lima. Durante el día no faltaron la visita de religiosas y laicos que se acercaron para felicitar al padre Juan. Y con una sonrisa y gracias, el padre Juan agradeció el detalle de su visita y regalo.

El padre Juan se ha hecho peruano con los peruanos

Pero la guinda de la torta estaba reservada para la noche. De un modo sorpresivo e inesperado laicos y religiosas se hicieron presentes en la misa de siete de agradecimiento al padre Juan por sus 80 años y a Santiago Cantón por los 32 de su ordenación y despedida de Lima. Ambos agradecieron a la gente por sus detalles y acogida. Seguidamente en el auditorio se pasó una presentación de diapositivas powerpoint de la vida y obra del padre Juan Martínez en las que de modo virtual se hicieron presentes con sus saludos su hermano Ramón y cuñada, el Vicario, P. José Miguel, las Trinitarias de clausura de Lima y hasta el mismo Padre Provincial. Y sin exagerar la Parroquia de Trinidad tiró la casa por la ventana y hasta hubo torta, baile, cohetes y mariachis mexicanos. Como otro Pablo que se hizo judío con los judíos y griego con los griegos, el mismo padre Juan se ha hecho peruano con los peruanos. Realmente se le veía a Juan contento y feliz de haber cumplido 80 años con esta su familia de la comunidad y de la parroquia de Lima.

El P. Juan Martínez, aquel buen profesor de Biblia que por los años 60 del siglo pasado andaba por Córdoba enseñando a muchos trinitarios de los que hoy tienen sesenta y setenta años, sigue “firme y adelante”. Anda con buena salud, hombre orante, reflexivo, confesor que ha sustituido en el confesonario al Padre Rafael, vicario parroquial dispuesto a todo lo que haga falta hacer en la parroquia. Pero sobre todo dispuesto a visitar y confesar los más de 100 enfermos que hay en la parroquia.

Ante este buen trinitario caracterizado por su humildad, trabajo, silencio, amor a la Orden Trinitaria y servicio a los enfermos, solo nos queda a los que hemos vivido con él en varias ocasiones decirle.

¡Gracias padre Juan por su testimonio y vida de entrega a Dios y a los hombres!

Ángel García Rodríguez

Lima. Perú

8

...News