revisión caso OVNI abducción del matrimonio hill
Relato, hipnosis y evidencias
"Intentaron relativizar lo sucedido, pero en los días siguientes se dieron cuenta de que no eran capaces de hacer una cronología de lo que había pasado..."
※ El suceso --extenuante-- que vivió la pareja conformada por Barney y Betty Hill es considerado como el primer caso de abducción presuntamente extraterrestre de la era moderna.
A pesar del respeto ante un hecho devenido histórico, la obligación de repensar una y otra vez las aristas que estos eventos han ofrecido es determinante para intentar comprender cada vez mejor lo que pudo haber sucedido.
Aquella noche del 19 al 20 de Septiembre de 1961 la pareja iba en el automóvil de regreso a casa. Barney Hill al volante, frente a las horas nocturnas. La carretera estaba desierta, viajarían tranquilos hasta New Hampshire.
Todo marchaba según lo planeado hasta que una luz incandescente inundó con violencia los espejos del automóvil. Betty quiso ver lo que dio a llamar "la estrella que se mueve" con unos binoculares y Barney detuvo el coche. Era una luz alta, al costado del cielo. Pero cambió de dirección, hizo una curva y Barney se dio cuenta de que "la estrella que se mueve", en realidad, se acercaba.
Encuentro cercano
Continuaron su marcha con la luz siempre allí, danzando entre las montañas y acercándose. Los nervios comenzaban a apoderarse de Barney, y la carretera N°3 estaba desierta. Al pasar unos minutos aquel brillo pasó frente al automóvil y voló hacia la derecha. Fue tan brusco el movimiento que Barney detuvo el coche en medio de la ruta, tomó el arma de la guantera, los binoculares y se apeó. Se apartó un poco del auto y dio unos pasos en dirección hacia donde, a unos treinta metros, la luz flotaba en el aire. Lejos estaba de ser una estrella: lo que brillaba era una nave circular. Alzó los binoculares y lo que vio lo dejó pasmado, en la nave había ventanas y peor aún; detrás de las ventanas había personas.
Diez figuras humanoides trabajaban en un panel de instrumentos. Se movían de forma mecanizada y vestían un uniforme negro con unos gorros en punta. Barney Hill contaría años más tarde que escuchó una voz diciéndole "Quédate donde estás y sigue mirando". Al mismo tiempo, unas luces rojas aparecieron a los costados de la nave y ésta no dejaba de acercarse. En aquel momento el hombre estalló del pánico y volvió corriendo al automóvil en estado de histeria, gritando "¡Nos van a capturar!".
Según cuentan ambos testigos mientras se daban a la fuga, la nave cambió de ubicación y se posicionó directamente sobre el cenit del coche.
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