On demand, la opción de negocio
ante el COVID-19
La tecnología es una alternativa de floating para la economía global: lo que antes era privilegio
para pocos se vuelve accesible hoy para muchos.
Tras la crisis que estamos pasando los negocios “on
demand” comienzan a ser una alternativa para los
emprendedores que busquen salir a flote en esta
nueva economía
Anteriormente la economía era regida bajo un estatus,
el ser propietario. La mentalidad era poseer, ser
restrictivo y dominante, cerrando las posibilidades
a muchas personas; sin embargo, actualmente este
esquema resulta obsoleto.
La tecnología se ha vuelto renovable para la economía
global, y de alguna manera ha sido un floating para los
bienes ante esta situación que estamos atravesando, la
contingencia de salud.
Así que, los países utilizan las herramientas a su alcance
para amortiguar y enfrentar la crisis provocada por el
coronavirus y “on demand” es la opción viable.
Varias nacionales han empezado a instalar un nuevo
sistema, una nueva economía que define sus reglas,
valores y modos, y es, través de la digitalización.
Siendo esta un vehículo para desbloquear una cultura
de siglos: la propiedad ya no es un objetivo deseable.
Por el contrario, un bien o servicio tiene valor,
actualmente, si se puede compartir, pasar de mano en
mano, reutilizar, reciclar y alquilar.
07 • @revistaclaseempresarial
Es decir, rentar una oficina para empezar una empresa
o startup, alquilar un auto el fin de semana en vez
de pagar el mantenimiento todo el año, un vestido,
muebles, herramientas, cualquier forma de intercambio
es bienvenida. Esta nueva modalidad expande la
frontera de las posibilidades en el emprendimiento, lo
que antes era privilegio para pocos se vuelve accesible
hoy para muchos.
On demand es el nuevo concepto sonado en la industria
tecnológica. Se trata de un nuevo estándar de servicio,
vinculado a los requerimientos de las empresas. Se
perfila como un outsourcing más evolucionado,
capaz de ajustarse y modelarse a los cambiantes
requerimientos de las empresas. Esta forma viene a ser
una evolución y revolución del servicio.
Sin duda alguna, expertos señalan a la generación
centennials y millennials como los responsables de
esta revolución emprendedora. Considerados así,
como los grandes actores de esta transformación,
quienes marcan el pulso, movilizan contra el consumo,
desafían multinacionales.
Y ante esta crisis, los emprendedores se ven obligados
a reflexionar en cada acción y su impacto, imponiendo
nuevas reglas de negocio que apela fundamentalmente
el origen de los bienes y productos. Denominándose
como la tendencia on demand y no como dueños, lo
que les permite mayores oportunidades.