CE: ¿Cuáles son para usted, las principales ba-
rreras sociales que deben superarse para que las
mujeres emprendedoras, socias o no, pudieran
lograr objetivos personales?
LC: Desgraciadamente, muchas veces nos encon-
tramos con oposición de las personas más cercanas a
nosotras. Nuestros padres, esposos, familia o amigos
bien intencionados y por el cariño que nos tienen,
pero quienes no apoyan y en muchas ocasiones nos
tratan de disuadir y ver que no es el momento, “te
acabas de casar” o “ estas esperando un bebé”. “No
vas a poder”. A los cuales hay que desoír para seguir
adelante con nuestros planes.
CE: Y en este mismo punto, ¿Cómo puede el sector
privado colaborar en el alcance de estos objetivos?
LC: Las asociaciones como la nuestra pueden hacerlo
a través de pláticas o conferencias en donde animen a
las emprendedoras a perseguir sus sueños.
Las cosas no serán fáciles, pero no se puede llegar a
una meta o a cumplir un sueño cuando no se intenta,
como dijo Thomas Alva Edison “no fueron mil intentos
fallidos, fue un invento de mil pasos”.
CE: En el aspecto de la formación, ¿cuenta la
mujer mexicana promedio, con las herramientas
necesarias para poder tomar la iniciativa de un
negocio propio?
LC: Como en todo, muchas sí, muchas no. Algunas
que ya han egresado de las universidades en carreras
como marketing, administración o similares sí, en
algunas áreas, pero tampoco en la mayoría donde
se necesita conocimientos para lograr nuestros
objetivos.
CE: ¿En qué se debe mejorar, a nivel educativo,
para que las mujeres puedan alcanzar las
aptitudes correctas, para desempeñarse en un
emprendimiento o negocio?
LC: Creo que en esto no lo dividiría por género. Soy
persona que me he dedicado a la educación durante
muchos años y creo que todos necesitamos de
un mejor plan educativo que yo comenzaría en la
secundaria, no importando el área al que me vaya a
desarrollar. Le llamaría Educación Práctica de Vida. Por
ejemplo: una materia relativa a finanzas personales.
Esta área es totalmente olvidada y la necesita todo
el mundo. Cómo abrir, llevar y reconciliar una cuenta
de banco. Cómo administrar nuestro dinero, de qué
manera ahorrar desde que somos jóvenes. Cómo usar
una tarjeta de crédito.
En México el 98% de los adultos mayores no están
preparado para su vejez, momento en que se nece-
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