Clase Empresarial. MX Agosto 2020 | Page 10

Del T-MEC y el sector de la construcción mexicana Al concretarse este tratado, se espera que a corto plazo el flujo de mercancías e inversiones en México continúe y traiga mayores beneficios almacenes, parques industriales, infraestructura industrial (edificación no-residencial), generando mayores fuentes de empleo y aumento en los ingresos de la población ocupada. Mayor ingresos = mayor demanda: Con el desarrollo de la industria, el ingreso se expanderá y provocará, a su vez, mayor consumo. Para la industria de la construcción significará una mayor demanda de viviendas e incentivaría la construcción de centros comerciales y generación de servicios. Después de tres años de negociación, por fin el tratado entre México, Estados Unidos y Canadá dio arranque en julio de este año. De acuerdo a la consultora de bienes raíces Newmark Knight Frank, este acuerdo dará certidumbre a los inversionistas que están considerando la región para invertir, siendo la industria de la construcción uno de los sectores más beneficiados. La consultora hace el análisis y recuerda que en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) México se posicionó en la foto mundial de la economía, representando la zona libre de comercio más extensa del mundo y que en el mercado inmobiliario industrial su impacto ha sido transformador. No se espera menos ante la implementación del T-MEC. Con lo anterior, se espera que a corto plazo se establezca un mejor flujo de inversiones entre Estados Unidos y México, que impulsarán el crecimiento económico del país mediante los siguientes puntos: Incremento en las inversiones extranjeras: El sector industrial mexicano podría verse favorecido, en especial, el mercado manufacturero lo cual se traduciría en un crecimiento significativo en la construcción de fábricas, Certeza económica: La estabilidad en el tipo de cambio, permitirá a las empresas tener mayor confianza al realizar los presupuestos de construcción de obra; así mismo, con el mayor control de la inflación y reducción gradual de las tasas de interés, provocará que se reduzca el costo financiero de las obras. Consolidación y crecimiento de las inversiones ya establecidas en el país, esto se generará al ver que existe seguridad en la apertura del mercado estadounidense y mexicano, especialmente en el rubro automotriz y manufacturero. Mayor disponibilidad de insumos y materiales para la construcción de máxima calidad y mejores tecnologías a precios competitivos internacionalmente. A pesar del Tratado firmado por estas tres potencias que alienta al mejoramiento del clima económico de México, no está de más continuar con el trabajo de fortalecimiento del sector y todos los temas relevantes en el país tal como son: el fortalecimiento de la instituciones, la disminución de la delincuencia y corrupción, así como el fomento a las buenas prácticas empresariales, elementos que son indispensables para potencializar los beneficios que este nuevo pacto comercial traerá para el país, más ahora en el que estamos tratando de salir de este increíble bache económico que dejó la pandemia. 09 • @revistaclaseempresarial