CIOSAD News CIOSAD News - EDICIÓN JUNIO 2017 | Page 19

depresión. La pérdida de las piernas-dijo- era realmente un motivo muy genuino para su angustia. - Es que no es eso Doctor-dijo Juan- mi depresión no tiene que ver con la pérdida de las piernas. No es la discapacidad lo que más me molesta. Lo que más me duele, es el cambio que ha tenido la relación con mis amigos. El psiquiatra abrió los ojos y se quedó mirán- dolo, esperando que Juan Sinpiernas, com- pletara su idea. - Antes del accidente, mis amigos me venían a buscar todos los viernes para ir a bailar. Una o dos veces a la semana, nos reu- níamos a chapotear en el río y a hacer carre- ras a nado. Hasta días antes de mi opera- ción, algunos de los amigos, salíamos los domingos de mañana a correr por la avenida costanera. Sin embargo, parece que por el solo hecho de haber sufrido el accidente, no sólo he perdido las piernas, sino que he per- dido además, las ganas de mis amigos de compartir cosas conmigo. Ninguno de ellos me ha vuelto a invitar desde entonces. vedado.... El doctor lo serenó y siguió su razonamiento: Por supuesto que no había nada en contra de que el siguiera haciendo las mismas cosas, es más, era importantísimo que siguiera haciéndo- las. Simplemente, era difícil, seguir pretendiendo compartirlas con sus relaciones de entonces. El psiquiatra le explicó a Juan, que en reali- dad él podía nadar, pero tenia que competir con quienes tenían su misma dificultad...que podía ir a bailar, pero el clubes y con otros a quienes también les faltaran las piernas....po- día salir a entrenarse por la costanera, pero debía aprender a hacerlo con otros discapa- citados. Juan debía entender que sus amigos no esta- rían con ahora como antes, porque ahora las condiciones entre él y ellos , eran diferentes...- Ya no eran sus pares. Para poder hacer esas cosas que él deseaba hacer y otras más, era mejor acostumbrarse a hacerlo con sus iguales. Tenía entonces, que dedicar su energía a fabricar nuevas relaciones con pares. Juan sintió que un velo se descorría dentro de su mente, y esa sensación lo serenó. El psiquiatra lo miró y se sonrió... Le costaba creer que Juan Sinpiernas no estuviera entendiendo lo absurdo de su plan- teo... No obstante, el psiquiatra decidió explicarle claramente lo que pasaba. Él sabía, mejor que nadie, que la mente tiene resortes tan especiales que pueden hacer que uno se vuelva incapaz de entender lo que es evidente y obvio. El psiquiatra le explicó a Juan Sinpiernas que sus amigos no lo estaban evitando por desa- mor o rechazo. - Es difícil explicarle cuánto le agradezco su ayuda, doctor. Dijo Juan- Vine casi forzado por sus colegas, pero ahora comprendo que tenían razón...He entendido su mensaje y le aseguro que seguiré su consejo. Muchas gra- cias, ha sido realmente útil venir a la consulta - Nuevas relaciones con pares.- se repitió Juan para no olvidarlo Y entonces Juan Sinpiernas salió del consulto- rio del psiquiatra y volvió a su casa.... y puso en condiciones su sierra eléctrica..... Aunque fuera doloroso, el accidente había modificado la realidad. Le gustara o no, él, ya no era el compañero de elección para hacer esas mismas cosas que antes compartían... Planeaba cortarle las piernas a algunos de sus amigos, y “fabricar” así....algunos de sus pares. - Pero Dr.-interrumpió Juan Sinpiernas-yo sé que puedo nadar, correr y hasta bailar. Por suerte, pude aprender a manejar mi silla de ruedas y sé que nada de eso me está Dr. Antonio SOFAN GUERRA Coordinador academico @CIOSAD Facebook/CIOSAD WWW.CIOSAD.COM 19