que va a ser lugar común dentro de cincuen-
ta años, o dentro de diez, porque, no sé, Neru-
da inventó el lugar común de la poesía de
hoy, le decís a alguien que escriba un poema
y quiere escribir un poema como Neruda. Y
cambian sus palabras, en vez de decir: “tenía
dos ojos color negros”, dicen “tenía dos perlas
color azabache”…¿Qué? Si no hablas así vos,
me dan ganas de aconsejar; “Usá las mismas
palabras que cuando hablás”, y ahí ya vas a
estar más cerca de tener un estilo.
Eso es lo jodido de criticar, es como “aguantá,
dale cincuenta años”, esperá que se muera.
J: Siempre parece que el éxito viene post-
mortem ¿no? Y justo otro encuentra la
obra y hace plata con eso.
Si, yo me pregunto mucho sobre eso, sobre
qué van a hacer con nuestros chats, nuestros
posteos. No sé, te morís y te va re bien, te aga-
rra un biógrafo y va a entrar a tus chats a ver
que hablabas, como las cartas, los diarios. Así
que hay que tener cuidado con lo que cha-
teás, porque si sos groso, te los van a leer, eso
queda todo guardado. Te los van a publicar,
y cagaste. Entonces siempre hay que escribir
bien.
Me parece que hay que darle tiempo al ar-
tista para que vaya puliendo sus influencias,
siempre escribís parecido a alguien cuando
empezás, y cuando digo “empezás” me refie-
ro a los primeros diez años, no a los primeros
tres meses, hasta que podés ir mezclando
esos ingredientes que tenés hasta que ya no
identificás. Es como un licuado con veinte
frutas, ya no se siente nada, está la frutilla y
la banana pero no la podés cachar. Tenés que
escribir un montón y después quizás sale ahí
un estilo tuyo. Pero tener un estilo es lo más
jodido que hay.
A: Me hace acordar a que mi abuela siem-
pre decía que tenés que tener buena ropa
interior porque si te morís en la calle, por
lo menos tenés ropa interior decente.
Ese consejo de abuela es hermoso, porque no
es que por ahí vas a coger, es “te vas a morir
desnudo”. Yo no sé cómo lo estarán pensado
los historiadores pero hay mucho contenido,
si querés hacer la biografía de alguien y ver
sus chats.
A: ¿Sentís que estás encaminado en ese
estilo tuyo?
No, no, me parezco mucho a otros autores
que leo, me doy cuenta, pero por el otro lado,
¿qué le voy a hacer? Cuando me di cuenta un
día que no iba a poder despojarme de eso de
una, y que no iba a escribir de una con un es-
tilo personal, me di cuenta que tenés que es-
cribir, escribir textos de mierda, un montón.
Y eso se me hacía difícil en un principio, no
esperaba escribir re bien de una, y quizás, eso
no te pasa nunca en la vida, es la búsqueda,
es la incertidumbre.
A: Y van a tener que buscar mucho, porque
cualquier conversación pedorra que tenés
son cien mensajes.
Yo no estudiaría historia sólo por eso.
J: Yo creo que como buenos biógrafos lo
que van a hacer es modificarlo todo y ha-
cer su propia historia. Van a citar alguna
gilada.
A: Claro, no condenemos a un mal texto.
Bueno, mi consejo de la tarde es: Escriban
bien, elegante.
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