C(H)ARÁCTER
EL INOCENTE
CULPABLE
Javier RodrigoIndians" de Castillo y(Noveno de Bram
del Agatha Christie, "Drácula" grado)
Su libro favorito es "Ten Little
Stoker. En su tiempo libre ve series de televisión y navega en Internet. Le encanta los
juegos de estrategia e inversión como "Monopoly" y "Risk". Le encantan las películas
"The Dark Knight Rises" y "The Green Mile".
-1 La Familia Soft
El Señor Soft era un hombre alto, con mucha fama, querido, de negocios, y que se
destacaba por los programas de ayuda a la comunidad que había organizado en sus
empresas. Vivía en Orlando, Estados Unidos. Tenía un hijo, Felipe, de 32 años. Por
supuesto el Señor Soft tenía una esposa, la segunda, una joven de 26 años, con quien
contrajo matrimonio recientemente luego de una rápida relación, veinte años después de
haberse separado de su primera esposa Myriam, quien vivía en Nueva York.
El Señor Soft a diferencia de los otros millonarios, tenía peces y no perros, tenía una
pecera con sesenta y cinco clases distintas de peces, entre los que estaban bailarinas,
peces dorados, escalares, neones, discos, etc. Tenía también una gran colección de arte,
especialmente de pintores colombianos, como Botero, Obregón, Grau, Maripaz Jaramillo,
aunque su favorito era de una artista no muy conocida pero que a él le encantaba su
arte, llamada Diana Afanador. Tenía una biblioteca que estaba en el estudio, de tres mil
cuatrocientos ochenta y dos libros con temas de monedas, trescientos veinticinco para
niños, cinco mil para lecturas de adolescentes y adultos. Tenía un mayordomo, un ama
de llaves y una cocinera.
Su casa tenía cuatro habitaciones, más el cuarto de servicio, tres baños, el comedor, el
estudio, la sala, la cocina, un lavadero y una terraza que daba contra el cuarto del Señor
y la Señora Soft. La primera alcoba era de la pareja, la segunda era la de su hijo, la
tercera era la de huéspedes y la otra era la de los peces, que eran tantos que ocupaba el
espacio de dos habitaciones que recientemente habían unido para poner los últimos
acuarios adquiridos y que no cabían en una sola.
La cocinera, el ama de llaves y el mayordomo tenían su habitación allá en la casa Soft,
en una pequeña casa en la parte de atrás del jardín. Eran muy leales al Señor Soft. El
Señor Soft ya se había jubilado, pues tenía 72 años y aunque no iba a la oficina, desde el
estudio en su casa el estaba al pendiente de todo lo que sucedía en sus empresas y
tomaba las decisiones que fueran necesarias.
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