CENTRO SENTIDO I | Page 11

UNA JOYA EN LA BASURA J. Andrea Rozo Martínez El parque Tercer Milenio, se construyó con el fin de recuperar un sector el cual estaba en un nivel de degradación crítico, aislado y marginado, excluido y peligroso, ubicado en el centro de la ciudad, lugar representativo e importante por su memoria histórica y sus múltiples actividades gubernamentales, económicas y turísticas. Este parque está dotado de distintos escenarios de recreación y deporte, con la infraestructura necesaria para que éste sea funcional y atractivo, con amplias zonas verdes, senderos peatonales, ciclo rutas y estancias, aportando un valioso espacio público al lugar por lo que logró ser premiado en la categoría de espacio público por la XX bienal Colombiana de Arquitectura en el 2066, una clara intención de dignificar y revitalizar el sector, junto con la construcción del parque se planeó un reordenamiento en cuanto a vivienda y comercio que ayudarán a potencializar la recuperación del sitio. El parque se construyó y lastimosamente no se ejecutaron las intervenciones en cuanto a vivienda y comercio que constituían el proyecto completo, y éstos necesariamente tenían que ser tratados de manera simultánea, en este momento encontramos las consecuencias de realizar el proyecto a medias. El parque tenía una conexión directa con la Plaza de Bolívar y toda su ruta histórica y cultural del centro de la ciudad, pero debido a la mala imagen que éste presenta, y una infraestructura vial que corta y divide la relación con su entorno, esto genera un desinterés en los turistas y visitantes que llegan al centro. El parque Tercer Milenio es un espacio que no se ha integrado a la dinámica del centro; adicional a esto no cuenta con una población residente que se apropie de él, lamentablemente es tierra de nadie. Como experiencia podemos decir que visitar este parque, en un principio no es un buen plan, no es algo que llame la atención, al llegar al sitio uno no puede abandonar la sensación de inseguridad, nos vemos desconfiados y prevenidos, luego se percibe un olor desagradable ya que cualquier esquina es utilizada como baño por parte de los habitantes de la calle, esto intensifica nuestra sensación de desagrado y el aspecto de degradación y descuido que tiene el parque. Al recorrerlo nos podemos dar cuenta que a pesar del abandono y des-aseo; el parque ha mantenido su infraestructura, no se encuentran los juegos dañados, tampoco sillas rotas o adoquines. En su mayoría, presenta un buen estado. Luego identificamos los diferentes espacios dentro del parque con una temática y función determinada, y entrando un poco más en confianza, éstos lugares nos dan una sensación menos tensa y de ésta forma podemos identificar el valor urbano y arquitectónico que éste parque posee; sus jardines, senderos, juegos, zonas verdes y un hermoso telón de fondo que nos ofrece los cerros orientales, éste es un bonito lugar. Es una joya dentro de un basurero. Consideramos que el parque representa un aporte importante al conjunto que compone el centro de la ciudad y mientras no se planeen o se ejecuten en su totalidad, este proyecto no podrá funcionar, desaprovechando todo lo que nos puede brindar, tal vez sólo nos queda esperar a que el estado invierta en ésta recuperación y este parque pueda florecer exponiendo toda la belleza que tiene cohibida.