CEREMONIA DEL CAFÉ
La ceremonia o ritual del café en Etiopía es conocida como ‘buna’. Uno de los proverbios más populares del país reza: “Buna dabo Naw”, que traducido al español significa “El café es nuestro pan”.
Una ‘buna’ puede celebrarse sencillamente para beber café con amigos, pero también es habitual que se organicen estas ceremonias en pedidas de mano o para resolver algún conflicto vecinal o familiar. Las anfitrionas son siempre mujeres ataviadas con ropajes tradicionales del país y, antes de comenzar la ceremonia del café, muchas de ellas queman incienso para alejar cualquier tipo de energía negativa. Desde este momento, la ceremonia del café puede durar entre una y tres horas, dependiendo de cómo fluya la conversación con los invitados.
ETHIOPIA
Las cabras de la provincia de Kaffa (en el sudoeste) fueron las primeras en probar las bayas del arbusto, sorprendiendo a los pastores con comportamientos algo hiperactivos. En un principio, muchos de estos ganaderos repartían las bayas y hojas del cafeto (de la especie arábica) en el exterior de algunos monasterios, de forma que las oraciones nocturnas pasaron a estar aromatizadas por el fruto de la planta. Más tarde, algunas personas decidieron moler sus granos, descubriendo así que el polvillo resultante era ideal para elaborar una bebida deliciosa y energética.
Aunque la producción del café haya evolucionado mucho con el paso de los años, este todavía tiene un significado muy especial en Etiopía. Su ciudadanía sigue preparando esta bebida de un modo único; tostando, moliendo e infusionando los granos en una intensa e interesante ceremonia del café