Catalanadas Magazine Nº 20 Semana 18 Abril 2014 | Page 9

WEB El ministro del Interior fue zarandeado e insultado en la calle en Barcelona: '¡Eres un fascista!' MARTES WEB Si el domingo le propinaron un puñetazo a las puertas de una iglesia al líder del PSC, Pere Navarro, al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, le insultaron cuando salía de un céntrico restaurante barcelonés el pasado 6 de abril. Según fuentes cercanas al dirigente del PP catalán, la suma de estos dos altercados responde al clima de crispación política que se vive en Cataluña. Una teoría que también secunda Pere Navarro ante el rechazo de CiU, que pidió no "instrumentalizar" un problema "puntual". El incidente sufrido por el ministro del Interior fue muy parecido al que ha denunciado el líder de los socialistas catalanes, Pere Navarro. Jorge Fernández Díaz, histórico dirigente del PP catalán, había mantenido la discreción sobre unos hechos que sucedieron el domingo 6 de abril durante una celebración familiar, pero tras escuchar el relato de Navarro se sintió identificado con él y ha decidido hacerlo público para evidenciar la gravedad de la fractura social que -a su juicio- el proceso independentista está abriendo en la sociedad catalana... Cataluña, el "punto caliente" del yihadismo en Europa MIÉRCOLES Mientras Arturito Mas incluye en sus listas a un individuo considerado un islamista radical, varios informes han señalado en los últimos años a Barcelona y Cataluña en general como uno de los puntos calientes del yihadismo en Europa. Un informe de EEUU publicado por El País avisaba de que Cataluña debía ser vigilada y controlada por su condición de puente hacia el Mediterráneo y el grado de implantación de las comunidades paquistaní y marroquí en Barcelona. También aludía a la actividad islamista en otras localidades, como Reus, Badalona y Hospitalet y hablaba de la "preocupación" en la inteligencia estadounidense, que hacía que esta región de España se hubiera convertido en prioritaria para el departamento de Estado. El documento, además, defendía la creación de una unidad de inteligencia especial para controlar la amenaza yihadista en la zona, que tendría como centro de operaciones el Consulado en Barcelona. El objetivo, controlar la circulación de personas entre Cataluña, el sur de Francia y países como Argelia, Túnez y Marruecos. En España, las pesquisas sobre el islamismo radical en Cataluña se han topado con dificultades como los problemas para infiltrarse en las estructuras