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La patronal catalana de la pequeña y mediana empresa Pimec, que en los últimos
años ha mantenido una posición de relativa simpatía hacia el proyecto independentista de
CiU y ERC -aunque sin decantarse explícitamente a favor-, ha hecho ahora un claro paso
atrás. Su presidente, Josep González, ha anunciado este miércoles que su organización
"respeta el derecho a decidir", pero que "no hará ningún pronunciamiento más" sobre
esta cuestión.
"Respetamos el derecho a decidir porque entendemos que responde a un sentimiento de parte del empresariado de nuestra patronal pero más allá de esto no haremos
ningún pronunciamiento", ha dicho este miércoles González, entrevistado en el programa El Món a RAC1.
González ha razonado que, en esta cuestión, PIMEC tiene que conducirse con
"mucha prudencia", por la diversidad ideológica de sus asociados. "Tenemos una pluralidad muy fuerte de empresarios que piensan de todas maneras". "Nuestro empresariado
tampoco nos pide que hagamos más pronunciamientos".
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Pimec da marcha atrás en el
"derecho a decidir"
MIÉRCOLES
Rajoy retoca su estrategia catalana
MIÉRCOLES
En las últimas horas el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha introducido dos cambios notables a su inamovible y clara estrategia
de oposición a la consulta soberanista en Cataluña. Por un lado, ha acelerado el paso para frenarla legalmente lo antes posible en el Congreso; por
otro, ha introducido el argumento de las graves
consecuencias que tendría para España y, especialmente, para Cataluña.
“Yo no quiero una Cataluña empobrecida, que es adonde nos llevaría lo que algunos pretenden, ni quiero una Cataluña fuera de la Unión Europea, del euro, de la ONU o
de los tratados. Creo que nadie se lo merece”, afirmó en el Congreso para sumar el argumento de las consecuencias al de la legalidad.
El presidente del Gobierno reiteró en el pleno que, en su opinión, sería ilegal celebrar esa consulta porque la soberanía corresponde al conjunto de los españoles.