CANDÁS EN LA MEMORIA numero 2 Octubre 2018 CANDÁS EN LA MEMORIA revista numero 2 Octubre 2018 | Page 14

Candás pierde a José Viña, un marinero “con gotas de salitre en las venas” Gran amante de las tradiciones marineras, Viña no faltaba ningún 14 de enero a la misa de los náufragos. “Es una pena que la tradición se esté perdiendo”, aseguraba, “cada año vamos menos”. Y entre esas tradiciones, era un fijo en la Alborada, aunque “somos cuatro los que madrugamos”, lamentaba. Viña recordaba los buenos tiempos de la ma- drugada del 14 de septiembre. “Aquello era impresionante”, describía. “Venían barcos de guerra de la Armada Espa- ñola y el paseo marítimo se llenaba de gente. El Cristo era llevado en procesión por hombres de la Marina. Nada que ver con lo que hay ahora. Yo siempre voy, y seguiré yendo hasta que me muera”. Gran amante de las en tradiciones marineras, Viña no faltaba ningún 14 de enero a la misa los náufragos. “Es Gran de amante de las tradicio- Candás perdió la noche una pena que la tradición se esté perdiendo”, aseguraba, “cada año vamos menos”. Y nes entre esas tradiciones, era faltaba marineras, Viña no del martes una parte impor- un fijo en la Alborada, aunque “somos cuatro los que madrugamos”, lamentaba. Viña recordaba buenos ningún 14 de los enero a la misa de tante historia con el de septiembre. “Aquello era impresionante”, describía. tiempos de de su la madrugada del 14 “Venían barcos de gue- los náufragos. “Es una pena que rra de la Armada de Española y el paseo marítimo se llenaba de gente. El Cristo era llevado en procesión por hom- fallecimiento José Viña la tradición se esté perdiendo”, 1 bres de la Marina. Nada capitán que ver con Serrano, el último de lo que hay ahora. Yo siempre voy, y seguiré yendo hasta que me muera”. aseguraba, “cada año vamos menos”. Y entre esas tradicio- nes, era un fijo en la Alborada, aunque “somos cuatro los que madrugamos”, lamentaba. Viña recordaba los buenos tiempos de la madrugada del 14 de septiembre. “Aquello era im- presionante”, describía. “Venían barcos de guerra de la Armada Española y el paseo marítimo se llenaba de gente. El Cristo era llevado en procesión por hom- bres de la Marina. Nada que ver con lo que hay ahora. Yo siem- pre voy, y seguiré yendo hasta que me muera”. Gran amante de las tradicio- nes marineras, Viña no faltaba ningún 14 de enero a la misa de los náufragos. “Es una pena que la tradición se esté perdiendo”, aseguraba, “cada año vamos menos”. Y entre esas tradicio- nes, era un fijo en la Alborada, aunque “somos cuatro los que madrugamos”, lamentaba. Viña recordaba los buenos tiempos de la madrugada del 14 de septiembre. “Aquello era im- presionante”, describía. “Venían barcos de guerra de la Armada Española y el paseo marítimo se llenaba de gente. El Cristo era llevado en procesión por hom- bres de la Marina. Nada que ver con lo que hay ahora. Yo siem- pre voy, y seguiré yendo hasta que me muera”. grandes buques que quedaba en la villa. Viña falleció en Gijón a los 89 años de edad y hoy, a las 11 de la mañana, se celebrará su funeral en la iglesia de San Félix, para luego recibir sepultura en el cementerio municipal de San Bernardo. Viña vivió siempre unido al mar. “Era eso o morir de fame”, recordaba en una entrevista concedida a LA NUEVA ESPAÑA hace tres años, “así que yo siempre estuve vinculado a la mar”. Y lo hizo paso a paso, desde los escalafones más bajos, su- biendo “por méritos propios”, señalaba. Marinero, capitán de barcos y de yates, patrón de altura... Toda una vida en la mar. Su vinculación con Candás y con la mar era más que evi- dente. “Todos los candasinos tenemos gotas de salitre en las venas”, solía decir, y pedía ayuda para la cofradía de pes- cadores porque “son sólo dos familias las que quedan, y en cuanto esas lo dejen, se acabó todo”. BUENA PROA COLEGUI 1 BUENA PROA COLEGUI Texto Pedro Pascual para La Nueva España 14