Calavera Gui-Arte & Cultura Calavera Gui-Arte & Cultura N°005 | Page 11
mentablemente llegamos en una fecha donde había
mucha gente y la atención eres muyyy lenta, el cam-
ping estaba repleto de familias que iban literalmente
preparadas, tanque de gas, casas gigantes de cam-
ping, estufas eléctricas, plantas de luz que daban
una iluminación perfecta a los que no íbamos prepa-
rados y era tan divertido ver la forma de disfrutar de
las personas que parecía una gran ciudad dentro de
un pequeño pueblo.
Nos fuimos a instalar a la playa y pudimos apreciar
con mucha tristeza que la mayoría de las personas
no tiene respeto por el mundo que se nos entregó,
pañales sucios, envases, latas, bolsas entre mucha
basura tapizaban una playa que tiene unos rasgos
hermosos, tristeza, impotencia, desafío, un sinfín de
emociones que logro tocar nuestros sentidos y en-
tre nuestro grupo comenzamos a limpiar una gran
extensión del lugar, wooowww que diferencia, ahora
si…. A disfrutar de un buen día.
Risas, mucho salud, chistes, canciones, baile, todo
podíamos hacer, estábamos en ese lugar y ya no
pensaríamos en el mal viaje ni en la playa sucia, ni
en los lugares tan concurridos donde esperábamos
hasta media hora para que nos atendieran y otra me-
dia hora para que nos llevaran de nuevo algún otro
pedido. Conocimos al “Ahí está” un verdadero per-
sonaje quien llego y nos dio una tronada de cuello
que a muchos nos benefició, al querer pagarle con
una risa muy sincera nos contestó: No es nada, yo
solo vendo papas… y fue así como disfrutamos unas
ricas papas con salsa y con un descanso corporal
increíble.
Esa noche en nuestro camping hicimos una peque-
ña fogata que nos sirvió para seguirnos conociendo,
cada uno de ellos dejo en mí una enseñanza única…
El ultimo día la pasamos aún mejor, todos éramos
ya una familia, se hacían grupos para ir a comprar
víveres o simplemente conocer un poco el lugar y
cabe recalcar que es un pueblo muy muy pequeño,
con lo básico y esencial, donde la mayoría de la gen-
te te trata como amigo y donde orgullosamente pue-
do decir que conocí personas las cuales estuvieron
atentos a nosotros y de los cuales me quede con un
hermoso recuerdo.
Arturo Curiel una excelente persona me invito a de-
sayunar un menudo INCREIBLE, lo calentó encen-
diendo las brasas que aún quedaban vivas de la no-
che anterior, tortillas y una deliciosa agua de coco,
que