entre el 3 % y 4 %, mientras que en proyectos de edificación los costos podrían aumentar entre el 5 % y 6 %.
En infraestructura , este aumento podría ser aún más notorio , alcanzando hasta el 10 %, debido a que entre el 25 % y 30 % de los componentes de estos proyectos están directamente relacionados con los productos sujetos a aranceles .
Por último , existe una posible desaceleración en el Producto Interno Bruto ( PIB ) de la industria de la construcción , que podría reducirse entre un 3.5 % y 5 %. Esto , a su vez , tendría un efecto en el
PIB nacional , con una caída de hasta 0.3 puntos porcentuales debido a la relevancia del sector en la economía mexicana .
Si bien estos desafíos podrían impactar en la rentabilidad de los proyectos inmobiliarios y reducir las perspectivas de crecimiento en el corto y mediano plazo , a pesar de los retos , la situación también puede ser vista como una oportunidad para fortalecernos como país y mitigar los efectos , como , por ejemplo , fomentar el uso de materiales nacionales y buscar alternativas más económicas .
BUENA VISTA 17