Articulo
DEPARTAMENTO USADO:
¿ oportunidad o riesgo?
EL ÍNDICE DE VIVIENDA CRECIÓ 8.2 % EN EL PRIMER TRIMESTRE DE 2025.
En México, la vivienda usada se ha convertido en la protagonista del mercado inmobiliario en 2025. En varias zonas metropolitanas, más de la mitad de las operaciones hipotecarias corresponden a propiedades con uno o varios dueños anteriores, un cambio que refleja la búsqueda de mejores ubicaciones, precios accesibles y mayor metraje frente a la vivienda nueva.
Este movimiento ocurre mientras la vivienda registró un incremento del 8.2 % en el primer trimestre, de acuerdo con la Sociedad Hipotecaria Federal( SHF), lo que vuelve al mercado secundario una opción cada vez más viable para miles de familias.
Sin embargo, este auge viene acompañado de un escenario complejo. En distintos puntos del país se han reportado casos de compradores que, tras adquirir un departamento usado, descubren problemas no visibles durante la negociación: vicios ocultos, remodelaciones sin permisos, daños estructurales o adeudos heredados que aparecen después de firmar.
Este incremento coincide con reportes de portales inmobiliarios que advierten un aumento de estafas y documentación irregular en 2025, lo que ha encendido alertas entre analistas que señalan que una oferta atractiva puede convertirse en un gasto elevado si no se cuenta con información técnica confiable.
Los datos confirman la magnitud del fenómeno. Estudios recientes muestran que Nuevo
León, Jalisco, Estado de México y Ciudad de México concentran la mayor parte de créditos hipotecarios; además, más del 55 % de los financiamientos para vivienda usada se otorgan en Ciudad de México, Estado de México y Baja California Sur, según datos de Tinsa México.
El desplazamiento hacia propiedades de segunda mano responde a la presión de precios y a la amplia oferta en zonas consolidadas, pero también exige procesos de verificación más profesionales para evitar sorpresas posteriores.
Por ello, ALIGNMEX, empresa especializada en análisis, estructuración y operación de proyectos inmobiliarios, ha observado un patrón claro: la demanda por vivienda usada crece, pero también los riesgos relacionados con compras poco informadas.
De acuerdo con la empresa y sus filiales especializadas en inmuebles certificados, muchos problemas que enfrentan los compradores derivan de revisiones insuficientes y de la falta de una validación técnica integral.
Para Roberto Ordorica, director general, la brecha entre el precio de venta y el valor real de un departamento se amplía cuando la propiedad no ha sido verificada en aspectos estructurales, legales y administrativos.
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