1) M éxico
ante la migración internacional y
T rump
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ra de Estados Unidos pidiendo asilo, lo que
genera fuertes impactos sociales y políticos
en México y mayores amenazas económicas
y políticas de tal personaje si México no frena
tales flujos migratorios.
El mes de abril de 2019 muestra una profun-
dización de la crisis migratoria, de fronteras
y de las relaciones de México con Estados
Unidos. La afluencia masiva de migrantes en
situación irregular que ingresan a México
con la intención de llegar a Estados Unidos
y la política cada día más hostil del gobierno
estadounidense contra ellos, configuran un
escenario de enorme complejidad y con-
secuencias potencialmente trágicas dentro
de nuestro país. Por un lado, las estaciones
migratorias de la frontera sur se encuentran
al borde del colapso por el volumen de soli-
citantes de asilo, en su mayoría provenientes
de Honduras, Guatemala, El Salvador y Vene-
zuela. De acuerdo con el Alto Comisionado
de Naciones Unidas para los Refugiados
(ACNUR), sólo en los primeros tres meses
del año han ingresado 12 mil 716 migrantes
y a finales de este año pueden ascender a 60
mil los solicitantes de refugio, y el Instituto
Nacional de Migración (INM) reporta que 5
mil 366 migrantes permanecen en distintos
centros del área fronteriza, en espera de
documentos que les permitan regularizar
su estancia en México.
A la vez, los principales puntos de cruce de
la frontera norte viven el hacinamiento de
quienes se encuentran a la espera de que las
autoridades estadounidenses les concedan
audiencia para reconocerlos como refugiados.
Además de las fuertes tensiones que estos
flujos generan en las ciudades fronterizas
mexicanas por la limitada capacidad institu-
cional y carencias financieras, los migrantes
enfrentan la lentitud deliberada del gobierno
de Estados Unidos para recibir las solicitudes
que implican semanas y hasta meses, luego se
les obliga a regresar a México durante varios
meses más para esperar la respuesta a su so-
licitud con mayores problemas en su estancia
en nuestro país (La Jornada, 20 abril 2019).
La crisis migratoria, de fronteras y con Estados
Unidos, le plantea a México entre otros los
siguientes desafíos: el país no cuenta con la
infraestructura y los presupuestos necesarios
para albergar y atender adecuadamente a más
de diez mil migrantes de Centroamérica en el
país como sucede hoy; estos flujos migratorios
han venido a complicar la ya difícil relación con
el presidente Trump, y la recurrencia de estos
flujos migratorios en México han generado
algunos brotes de xenofobia y racismo.
Sobre el primer desafío se puede pedir asis-
tencia del Alto Comisionado de las Nacio-
nes Unidas para los Refugiados (ACNUR),
gestionando un aumento importante de los