BRUJULA CIUDADANA La reconstrucción en un marco de solidaridad | Page 72

Brújula Ciudadana 93 70 en línea que, de manera experimental e intui- tiva, echaron a andar con un simple formato en línea. Las primeras brigadas salieron, sin saber exactamente qué iban a encontrar, cómo iban a llegar y qué tenían que hacer, cómo se iba a procesar la información y qué se haría con ella. Las primeras cincuenta peti- ciones, hay que ser honestos y reales, fueron cercanas al desastre… no hay culpables. Sin embargo, los jóvenes cumplieron y hacían lo que debían hacer, concentrados en sus pan- tallas y tratando de resolver empíricamente una tabla de datos y metadatos que no dejaba de engordar a cada minuto de la jornada. La impaciencia vino de los líderes de brigada, profesores arquitectos, listos a salir al campo de batalla sin armas… ni experiencia. Esa impaciencia, que rayaba entre la intolerancia y las prontas acusaciones… nada que no se resolviera con un:-- “si usted sabe hacerlo mejor, lo invito a sentarse de este lado, para que me explique”…. Esa fue la frase de oro de un joven que esperaba instrucciones de los adultos experimentados, que tampoco sabíamos muy bien qué hacer. Esas primeras tres horas, cercanas al pánico, fueron mejorando: de tres jóvenes pasaron a ser seis, luego diez, luego varias decenas. Tomaron, no solo las calles, sino dominio de sus territorios virtuales y se expandieron por las computadoras del Centro de Vincu- lación. Aquí se hizo patente la presencia de la verdadera experiencia ante situaciones de manejo de capital humano, impulso colectivo, vocación de servicio y oficio de arquitectura