BRUJULA CIUDADANA La reconstrucción en un marco de solidaridad | Page 49

2. E l impacto regional de los sismos 47 Las inspecciones a escuelas quedaban bajo sospecha, pues no existe un equipo profesional para ello; el equipo de protección civil municipal que había visitado la escuela por el sismo la primera vez había permanecido cinco minutos en la escuela. Me cuesta trabajo asegurar que alguno de ellos fuera arquitecto o ingeniero. La tarea es a largo plazo, los recursos no llegan, aunque existan, son volátiles, no los ve- mos con evidencia contundente. Una semana después me sigo preguntando ¿qué hubiera pasado si la sociedad civil no hubiese reac- cionado? Hay un abismo de desconocimiento del sistema político del país con respecto a las zonas rurales del país. En Morelos en- contramos a un comité de padres de familia recuperando algunas bancas, materiales de la escuela, que a simple vista parecía que iba a derrumbarse. Todavía me sigo preguntan- do: ¿Cómo podían estar dentro? El discurso gastado de que la seguridad es lo primero, sé que sólo es eso, una promesa vacía. Muchas secretarías gubernamentales obligaron a sus empleados a trabajar, cuando los edificios presentan daños visibles y riesgosos. Sabemos que esto no se arregla llevando víveres una sola vez, estamos proyectan- do ayuda hasta el mes de diciembre, esta- mos haciendo redes para lograr efectividad. Se requiere que la entrega sea directa, de persona a persona. No puede haber inter- mediarios, la sociedad reclamará y será ella misma quien verifique y determine lo que haga. La sociedad tiene clara la ineficacia de las instituciones gubernamentales de norte a sur, y sabemos que la reconstrucción de las zonas durará mucho tiempo y sólo la sociedad organizada, levantará estas zonas, haciendo el trabajo ella misma. La etapa de reconstrucción apenas empieza.