BRUJULA CIUDADANA La reconstrucción en un marco de solidaridad | Page 13
1. D esafíos
de la reconstrucción
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un plan de obras masivo para el sur-sureste
del país. Pero el gobierno ha puesto sobre
la mesa una cifra conservadora para no alte-
rar el presupuesto de la federación y, según
dicen, garantizar la estabilidad económica.
El problema no es sólo el monto, sino tam-
bién la forma. En Oaxaca y Chiapas se anun-
ció primero que se repartiría dinero mediante
tarjetas bancarias con montos que oscilan
entre 15, 30 y 120 mil pesos de acuerdo
a un censo que llevó a cabo la SEDATU.
Según este esquema, cada familia se encar-
gará de la autoconstrucción de sus hogares.
Posteriormente, se dio a conocer, el 16 de
octubre, que alrededor de 118 mil tarjetas
se destinarían para aquellas dos entidades y
para Morelos, Puebla y la Ciudad de México
pero que ahora serían administradas por
el titular del Banco del Ahorro Nacional y
Servicios Financieros (Bansefi), un personaje
muy polémico, lo que puede provocar mayor
desconfianza y confusión administrativa.
Por su parte, el INFONAVIT anunció diez
medidas que incluyen entregar los recursos
de sus propios acreditados; otorgar hasta un
segundo préstamo (no está claro tampoco
bajo qué condiciones y a qué tasa); un apoyo
de pago en renta durante seis meses por
entre 3,000 y 6,000 pesos; y un Seguro (que
tampoco está claro cómo va a operar) para
enseres menores, por una cantidad de 20,000
El problema no es solo el monto destinado a la
reconstrucción, sino también la forma de distribuirlo.
Primero se habló de repartir tarjetas bancarias para que
cada hogar se encargara de la autoconstrucción y luego
se anunció que serían administradas por Bansefi.
pesos. El FOVISSSTE fue más tacaño y sólo
dispuso que el dinero de sus contribuyentes
se destine a la reparación de casas (y no sólo
para adquirir viviendas).
En el caso de la Ciudad de México, el pro-
grama es más complicado: para financiarse,
se dijo que por cada peso que aporte el
Gobierno Federal, el gobierno de la ciudad
pondrá tres (aunque pueden ser dos, aclaró
por su parte el Jefe de Gobierno). Estos re-
cursos, según el Secretario de Hacienda, se
invertirán en un bono cupón cero (similar a
un bono de deuda pública como un CETE)
que lo multiplicará por cinco para crear
un fondo que se pondrá a disposición de