BRUJULA CIUDADANA El futuro de la agenda de aquí y de allá | Page 6
Brújula Ciudadana 83
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Una reacción al avance de las agendas de los
derechos de las mujeres, pueblos indígenas,
migrantes, población LGBTI, entre otros, así
como perspectivas sobre no discriminación,
derechos ambientales y una amplia gama de
derechos que tiene ahora una respuesta política y cultural. Una respuesta de contracultura
a la democracia, sus valores y prácticas.
El resultado de las elecciones en EUA se
suma a lo que pasó en el Reino Unido y la
decisión de salir de la Unión Europea; a lo
que ha pasado en América Latina recientemente en relación a las nuevas modalidades
de golpes de Estado en Honduras, Paraguay
y Brasil (en este último, por ejemplo, se pasó
de tener a la primera mujer presidenta, a
un gabinete formado exclusivamente por
hombres blancos). Se suma a la ola conservadora de Europa (Francia, Bélgica, Austria,
Noriega, Dinamarca, Suecia y más países)
y las alarmantes restricciones de derechos
humanos de Rusia y China. Forma parte
de ese proceso donde gobernantes violan
derechos humanos con toda impunidad
y se ufanan de ello: por ejemplo, el caso
del presidente filipino que presume 4,500
asesinatos de “drogadictos, homosexuales,
personas en situación de calle y delincuentes” y ¡encima dice que va por más! Se suma,
además, a las legislaciones abiertamente
homofóbicas y restrictivas de varios países
africanos como Uganda.
Estas reacciones también
se deben leer como una
respuesta a la manera en
la que se ha realizado la
globalización económica,
que ha generado
crecimiento económico y
simultáneamente mayor
pobreza. Un modelo que ha
generado una concentración
de la riqueza en unas
cuantas manos como nunca
antes en la historia de la
humanidad, en perjuicio de
millones de personas.
De lo “políticamente incorrecto” a lo
socialmente aceptado/permitido
El discurso de DT ha permitido minar las
barreras éticas de lo que llamamos “políticamente incorrecto”, para convertir en
socialmente permitidas y aceptadas las expresiones racistas, xenófobas, misóginas
y una larga lista de expresiones basada en
fobias. La cantidad de expresiones de este
tipo durante la campaña, pero sobre todo