Boletín SUAyED SEPTIEMBRE | Page 15

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para prevenir trastornos , o bien, atenderlos, con el fin de que faculten al individuo para poder experimentar un estado de bienestar.

Es imperativo mencionar la salud emocional, la cual juega un papel importante en la salud mental y sexual. La emoción está íntimamente relacionada, con el significado; y es responsable de regular el proceso dual pensamiento-acción. Para que se produzca un cambio emocional, es indispensable que primero se dé un cambio cognitivo. Y en esto último es donde interviene el psicólogo.

Factores como son los biológicos, psicológicos, socioeconómicos y los campos morfogenéticos , impactan en la salud emocional, mental y sexual. Es responsabilidad tácita del psicólogo tenerlos en cuenta al momento de determinar el tipo de intervención que convendrá implementar en el proceso psicológico del paciente.

Es muy importante tener presente que la salud (emocional, mental, sexual) va mucho más allá que la ausencia de trastorno. La salud, como mencioné, tiene que ver con un estado de bienestar.

Si la tendencia natural del ser humano es hacia la autorrealización, hacia su bienestar, qué impide que lo lleve a cabo. Es importante centrar los esfuerzos en el desarrollo de las capacidades y posibilidades del hombre atendiendo los factores que impactan en su bienestar.

Hay diversas estrategias de intervención y, sin importar el tipo de intervención que se decida implementar, es importante considerar que la postura del psicólogo, lo que piense de su paciente y de su situación, tendrá un impacto en su proceso psicológico.

Si se centra en el trastorno, contribuye con la ausencia de salud mental. Por el contrario, si se centra en su tendencia natural hacia el bienestar, más posibilidad de restablecimiento de salud habrá para el paciente.

Es imperativo mencionar la salud emocional, la cual juega un papel importante en la salud mental y sexual. La emoción está íntimamente relacionada, con el significado; y es responsable de regular el proceso dual pensamiento-acción. Para que se produzca un cambio emocional, es indispensable que primero se dé un cambio cognitivo. Y en esto último es donde interviene el psicólogo.

Factores como son los biológicos, psicológicos, socioeconómicos y los campos morfogenéticos , impactan en la salud emocional, mental y sexual. Es responsabilidad tácita del psicólogo tenerlos en cuenta al momento de determinar el tipo de intervención que convendrá implementar en el proceso psicológico del paciente.

Es muy importante tener presente que la salud (emocional, mental, sexual) va mucho más allá que la ausencia de trastorno. La salud, como mencioné, tiene que ver con un estado de bienestar.

Si la tendencia natural del ser humano es hacia la autorrealización, hacia su bienestar, qué impide que lo lleve a cabo. Es importante centrar los esfuerzos en el desarrollo de las capacidades y posibilidades del hombre atendiendo los factores que impactan en su bienestar.

Hay diversas estrategias de intervención y, sin importar el tipo de intervención que se decida implementar, es importante considerar que la postura del psicólogo, lo que piense de su paciente y de su situación, tendrá un impacto en su proceso psicológico.

Si se centra en el trastorno, contribuye con la ausencia de salud mental. Por el contrario, si se centra en su tendencia natural hacia el bienestar, más posibilidad de restablecimiento de salud habrá para el paciente.