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VG: ¿Qué es Bibliotecas para armar?
MN: Bibliotecas para Armar es un programa del Ministerio de Cultura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que, desde 2004, promueve la lectura a través del trabajo en bibliotecas comunitarias y otros espacios no convencionales (salas de espera, peluquerías, por ejemplo). El proyecto Leyendo espero es una iniciativa que ofrece instalar pequeños dispositivos de lectura en peluquerías y salones de belleza de la Ciudad de Buenos Aires.
VG: ¿Qué objetivos se buscan alcanzar?
MN: Estas bibliotecas de proximidad buscan acercarse al vecino y generar un espacio de intercambio de libros entre vecinos, al concurrir allí mismo donde surge la necesidad y la oportunidad de la práctica lectora. La peluquería es un lugar en donde se suceden encuentros, vínculos y tradiciones. El objetivo de Leyendo espero es encontrar la posibilidad de lectura literaria a partir de la creación de nuevas prácticas: un rincón de lo íntimo que mitiga la espera y habilita conversaciones para recomendar (o no) las lecturas de ciertos textos y compartirlos a través del préstamo domiciliario.
VG: ¿Quiénes pueden sumarse a la propuesta?
Puede sumarse a la propuesta cualquier peluquería y salón de belleza ubicado en la Ciudad de Buenos Aires. Para inscribirse deben enviar un mail a [email protected]
VG: ¿Cómo nace la idea de llevar libros a las peluquerías?
MN: La idea de llevar libros a las peluquerías nace con la intención de promover el derecho a la lectura en todos los ámbitos, ahí donde surge la oportunidad de la práctica de la lectura. La peluquería es uno de los lugares emblemáticos de la ciudad, un lugar (como pocos) a donde uno vuelve siempre.
VG: Leer ¿para qué?
MN: La accesibilidad a la lectura es uno de los desafíos centrales que las sociedades modernas deben afrontar como parte del desarrollo de los procesos de democratización. El conocimiento aparece como uno de los bienes fundamentales de la cultura a la que los Estados deben garantizar acceso público. Se asume, entonces, el derecho a la lectura, no como mero acceso al material bibliográfico, sino, más bien, a la práctica lectora como un hábito cultural que se adquiere y se desarrolla a lo largo del tiempo.
Entre peines, tijeras y libros
Cuando voy a la peluquería -donde paso alrededor de tres horas cómo mínimo- encuentro, para leer, revistas de modas y del ambiente de los espectáculos. En ellas, puedo enterarme de cuánto pesa una modelo, aprender qué ropa lucir en una boda tomando como ejemplo a una actriz, compenetrarme con el conflictivo divorcio de un cantante latinoamericano, y disfrutar de una enorme cantidad de artículos de sumo interés (para algunos, pero no para mí).
¿Cómo me sentiría si, mientras espero que la tintura en mi cabello haga efecto, tuviera una cita con Gabriel García Márquez, con Eduardo Galeano o con Alfonsina Storni? ¿Cómo se sentirían ustedes?
Por este tema, entrevisté a Mateo Niro, coordinador del programa Bibliotecas para armar del Ministerio de Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Lic. Mateo Niro coordinador del progrsma Bibkiotecas para Armar.
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Entrevista
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efecto, tuviera una cita con Gabriel García Márquez, con Eduardo Galeano o con Alfonsina Storni? ¿Cómo se sentirían ustedes?
Por este tema, entrevisté a Mateo Niro, coordinador del programa Bibliotecas para armar del Ministerio de Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Mateo Niro es Licenciado en Letras egresado de la UBA, donde dicta clases de Semiología. Es docente de Sociolingüística en el Profesorado Superior “Joaquín V. González” y de Narratología en la Universidad de General Sarmiento. Coordina el Programa antes mencionado. Publicó ensayos, artículos, novelas infantiles (Los secretos del relojero y El robo del siglo) y el libro de ensayos La República posible (con Diego Bentivegna). Junto con Facundo Manes realizó los ciclos televisivos Los enigmas del cerebro y Cerebro argentino y escribió el libro Usar el cerebro.