y un delgado cuello por el
cual se le hace imposible
tragar. Además, cuando no
se encuentran en el mundo
de los vivos, son cruelmente
torturados por demonios
del inframundo. Son vistos
como poco más que pequeñas molestias causadas a
los mortales, a menos que
su deseo se dirija hacia algo
vital, como la sangre. Sin
embargo, en algunas tradiciones, los gakis tratan de
evitar que otros satisfagan
sus propios deseos, valiéndose de la magia, las ilusiones, o los disfraces. También
pueden volverse invisibles o
cambiar sus caras para asus-
tar a los mortales. Sin embargo, los gakis son generalmente considerados como
seres dignos de compasión.
Así, en algunos monasterios
budistas, los monjes les dejan
comida, dinero o flores antes
de las comidas. Incluso desde
657, guardan un día especial
a para recordar a los gaki.
Muchos japoneses budistas
realizan ofrendas de alimentos para los gaki antes de
comenzar su propia comida,
ya que es la única forma en
la que puede alimentarse.
Dicha ofrenda puede llegar
a liberar sus quejosas y atormentadas almas.
PARANORMAL MAGAZINE
25