Berberana 255 Septiembre 2018 LR | Page 28

24 | berberana | septiembre de 2018 BUZÓN PREGÓN. Elvillar 2018 Justino Gainzarain Pueblo asentado sobre una colina que domina los verdes pámpanos de vigorosas vides y las ramas de ancianos olivos. Pueblo de brujas y dólmenes y en la antiguedad de fornidos atlantes que trasladaron desde el Olimpo la altiva sierra de Toloño para regular las lluvias y los vientos Pueblo con doce términos con nombre de vírgenes y santos en recuerdo de los asentamientos con sus ermitas e iglesias que en la antigüedad hubo. Allí a la luz de candiles se elaboraron los primeros vinos que hicieron famosa la villa los de BEBER y CALLAR Pueblo bien amurallado y con su hermoso castillo que nos defendía de sarracenos y moros y más tarde de reyes castellanos y aragoneses que disputaron con furor el dominio a nuestro rey navarro. Con la paz, las murallas cayeron y el castillo, en iglesia se transformó creando la hermosa torre que en altura a las de Laguardia superó. En el campo de coscojas la C/ Coscojal nació y la C. Argumento se convirtió en parlamento del pueblo para legislar leyes y juzgar. Villarejos y villarejas disfrutar en estas fiestas: reir,cantar y bailar y beber el vino de Elvillar EL DE BEBER Y CALLAR ¿ ES TAN RICO ? Sí... Jai Zoriontsuak Entre Baños de Navarra y el de hoy Mirentxu Saénz Magnifica Cantabria en su ámbito resplandeciente, el pueblo despierta pegado a la rivera, para alcanzar su otra orilla está el puente. Y al encuentro de la vega sale la recta carretera. la corriente viajera del Ebro al ameno llano riega, avenida del agua que desnudó a su próspero choperal, ahora le sirve de escolta sin fronda estival. En sus cultas áreas la vid fecundando sosiega, su acceso al pueblo converge con la calle principal, manos laboriosas crearon sus predios más singulares, por barrios unidos antiguos y populares, y prevaleciendo simbólico su templo parroquial. En el decurso su arquitectura es memoria eternizada, a su frontispicio le interpreta con relieve decorado, por seculares leones su pórtico custodiado, y la torre con fantasía barroca coronada. Erguida busca solemne su espacio en el cielo, difundiendo el tono festivo su elocuente campanada, en sus huellas se lee el pasado y en su piedra labrada, desde que arranca como un ciprés desde el suelo. Premiando su cuidado hacen alardes floridos, balcones y solanas con sus estampas más genuinas, el ayer se esconde en las callejas más pinas, y en los alares las golondrinas se ocultan en los nidos. Oyendo repicar a la campanita centenaria, nos unimos en los gozos cuando llega su día, en san Cristóbal la jota es una plegaria, y una gran manifestación de alegría.