¡BASTA YA! COLOMBIA: MEMORIAS DE GUERRA Y DIGNIDAD | Page 42

Una guerra prolongada y degradada. Dimensiones y modalidades de violencia
El siguiente testimonio de un paramilitar da cuenta de esta situación:
El Urabá es una zona que lleva muchos años bajo el yugo de la guerrilla. La población estaba cansada y la Fuerza Pública estaba maniatada, entonces, cuando llegamos nosotros como ofreciendo una solución y demostrándole a la comunidad y a la Fuerza Pública que éramos capaces de derrotar a la guerrilla militarmente, entonces contamos con el apoyo de la Fuerza Pública y de las mismas comunidades, contábamos con el apoyo de la gente, por eso el Urabá fue liberado. 30
Por su parte, los guerrilleros respondieron a la ofensiva paramilitar con una violencia que pretendía aleccionar a quienes habían permitido o colaborado con la incursión paramilitar. En contraste con la violencia de los paramilitares, la de los guerrilleros se efectuó selectivamente contra la propia población del territorio, lo que acarreó altísimos costos políticos. Este tipo de accionar de la guerrilla se registró, por citar un ejemplo, en San Carlos, Antioquia. En el informe elaborado por el gmh se refiere:
Casi dos meses después, el 16 de enero del 2003, ocurrió una nueva masacre en Dos Quebradas, Dinamarca y La Tupiada, en la que, en total, fueron asesinadas 18 personas. La guerrilla de las farc reconoció su autoría días después y expuso su explicación: según ellos, fue realizada en retaliación por la masacre cometida un par de meses atrás por los paramilitares en El Chocó. […] En el ingreso que un grupo de hombres del IX Frente de las farc hicieron al caserío, asesinaron a 11 personas que se encontraban reunidas en una casa, entre ellas siete menores de edad y una mujer embarazada. […] Después se dirigieron hacia La Tupiada y Dinamarca, donde asesinaron a siete personas más: tres en Dinamarca( dos jóvenes y una mujer) y cuatro en La Tupiada( dos hombres, una mujer y su hija de nueve meses); algunos de ellos fueron degollados. Los guerrilleros llegaron a Dos Quebradas preguntando qué casas tenían teléfono, hacia
30. Entrevista a Ever Veloza, alias hh. gmh, Informe de Justicia y Paz ¿ Verdad judicial o verdad histórica?( Bogotá: Taurus / Semana, 2012), 170. allí se dirigieron y mataron a algunos de sus ocupantes, tras acusarlos de ser informantes de los paramilitares. Luego se trasladaron hacia una casa donde estaban reunidos unos jóvenes después de un partido de fútbol, les preguntaron si eran paramilitares. Al contestar que no los invitaron a unirse a la guerrilla. Los muchachos volvieron a decir que no. Entonces los guerrilleros los asesinaron uno a uno. Luego, salieron por uno de los costados del caserío y se dirigieron hacia La Tupiada, donde asesina [ ro ] n a otras cuatro personas. 31
Además del tipo de anclaje del actor armado en un territorio determinado, el gmh observó la ocurrencia de ciclos de represalias que no siguieron objetivos estratégicos sino que se desencadenaron en el fragor de la confrontación. Pese a su carácter improvisado, estas formas de violencia afectaron objetivos de largo plazo. Dicho de otro modo, los miembros de grupos armados se vengaron de las acciones del enemigo que ocasionaron bajas entre sus filas. Estas venganzas, por lo general sanguinarias y crueles, estuvieron también dirigidas contra la población civil, considerada por el grupo atacante como el eslabón más débil y vulnerable del enemigo. En esta modalidad de violencia se inscriben los casos de miembros de la Fuerza Pública que respondieron a los ataques militares de la guerrilla con masacres o asesinatos selectivos. También se incluyen aquí las respuestas de grupos paramilitares a los secuestros de la guerrilla con masacres de civiles. Un ejemplo de este tipo de violencia fue la desaparición forzada de 42 campesinos en el corregimiento Pueblo Bello en Turbo, Antioquia. Un grupo de paramilitares al mando de Fidel Castaño fue responsable por esta acción tras el secuestro que hizo el Ejército Popular de Liberación − epl del administrador de una de sus fincas.“ La gente contaba que las desapariciones habían ocurrido porque la guerrilla se había robado un ganado de Fidel Castaño y él había dicho que esas 42 cabezas de ganado iban a valer 42 personas”. 32
31. gmh, San Carlos: memorias del éxodo en la guerra( Bogotá: Taurus / Semana, 2011), 125-126. 32. Testimonio de Euclides Manuel Calle Álvarez. Sentencia de 31 de enero, 2006, Caso de la masacre de Pueblo Bello vs. Colombia, cidh, consultado el 16 de mayo del 2013, http:// www. corteidh. or. cr / docs / casos / articulos / seriec _ 140 _ esp. pdf.
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