El Santiago Martín pondrá a prueba
al subcampeón de la EuroCup
Este domingo a las 12.00 CB Canarias-Uxue Bilbao Basket
El unoXuno por Fran Rodríguez
Por Kike García
Después de caer el pasado
sábado ante el Lokomotiv
Kuban (64-75) en la final de
la EuroCup., y de jugar el
miércoles con el Caja
Laboral, los “hombres de
negro” visitan el Santiago
Martín,
donde
el
CB
Canarias pondrá a prueba a
otro “grande” en territorio
lagunero.
Además de poder certificar
ya sí, matemáticamente la
permanencia
en
Liga
Endesa, el CB Canarias
arropado por su afición
intentará seguir agrandando
la leyenda del Santiago
Martín.
Nikos Zizis
Fotis Katsikaris ha calado tanto en Bilbao que se
trajo a su prolongación más inmediata del
banquillo a la cancha: Nikos Zizis. Este griego,
base o escolta, tiene más currículo que cualquier
joven parado universitario español y, a diferencia
de ellos, él es una esperanza en su equipo.
Excelso defensor, manejo de balón para
chuparse los dedos, inteligencia en pista pura y
dura y un tiro de tres casi malo, tímido y virgen,
que casi nunca mete ni moja.
Raúl López
El ‘Spanish’ Stockton, el genio de Vic, el más
grande de los que casi fueron grandes. Raúl
López tiene tanta calidad que puede jugar a esto
hasta que la muerte venga a por él. No hay
ninguna descripción que se pueda imaginar lo
que este base podría haber hecho en el
baloncesto español de no haber sido por las
putas… por las putas rodillas que se fueron con
el médico y su quirófano. Aún así, Raúl López es
un gran cerebro en la cancha.
Roger Grimau
Roger Grimau es posiblemente, con diferencia,
uno de los jugadores más antiestéticos de la liga.
Y es que lo tiene todo para ser el hazmerreir de
la ACB: pelo semiafro, mecánica de tiro infame y
echado casi a patadas del Barcelona de sus
amores. Pero de un Grimau nadie se ríe. Y es
que, con el perdón de los ofendidos, tiene ‘la
doble c’: calidad y cojones.
Mamadou Samb
El sueño africano por excelencia. Samb despegó desde
Tenerife una carrera meteórica que ha encontrado un pequeño
hueco en la ACB, lugar donde sus centímetros y su siempre
margen de mejora son apreciados. Para Katsikaris, Samb es
por ahora un devorador de oportunidades, un interior en el
interior de un banquillo que juega poco y anima mucho.