Liderado por los 10 puntos y la
intimidación de Víctor Medina,
el equipo tinerfeño se acercó en
el marcador hasta el 35 - 39,
pero tres tiros libres en los
últimos segundos permitieron a
Gran Canaria irse a vestuarios
con renta favorable de +7.
A la vuelta de vestuarios, el
partido entró en una dinámica
de intercambio de canastas que
favorecía al conjunto amarillo.
Santo Domingo se acercó en
varias
ocasiones
en
el
electrónico,
pero
los
grancanarios respondían de la
mano de González e Iribarren
(anotan los 18 puntos del
cuarto) y volvían a poner
diferencias. Así, 52 – 60 y todo
por decidir para el último
cuarto.
El cuarto periodo se inició con
la quinta falta personal de
Gonzalo Iribarren, momento
clave del encuentro. El jugador
grancanario
abandonó
la
cancha con 52 – 62, dejando a
su equipo sin ideas y derivando
en un parcial de 9 - 0 que
obligaba a la reacción del
banquillo amarillo. A la salida
del tiempo muerto, dos triples
consecut