BALTAZAR USHCA EL ULTIMO HIELERO DEL CHIMBORAZO BALTAZAR USHC1 | Page 3
Baltazar Ushca Tenesaca nació en los Andes ecuatorianos y desde los 15 años
se dedica a la labor de hielero, cosechando hielo de los glaciares naturales
alrededor del punto más alto del inactivo Volcán Chimborazo, para dotar de
dicho material al mercado de La Merced de Riobamba. La labor de hielero la
compartía con cerca de 40 hombres entre los que estaban sus hermanos
Gregorio y Juan, ambos criados como hieleras, sin embargo, el paso del tiempo
y las necesidades hicieron que cada hombre tome un distinto rumbo más
rentable, convirtiendo a Ushca en el último hielero del Chimborazo, como se lo
conoce en la actualidad.
La estatura de Ushca es de 1 metro 50 centímetros, y todos los martes y
viernes sube al pico más alto de la montaña caminando alrededor de 7 horas,
aunque haya lluvia, nieve o sol, para bajar 22 kilos hielo divididos entre 8 a 10
bloques envueltos en paja recolectada del páramo para mantener su
temperatura.
Su historia inspiró un documental titulado El Último Hielero, donde se cuenta el
cambio cultural y estilo de vida indígena desde la perspectiva de tres
hermanos.
El 13 de noviembre de 2017, a los 74 años de edad, Ushca recibió en una
ceremonia realizada en Riobamba, el título Doctor Honoris Causa, por el
Instituto Mexicano de Líderes de Excelencia , hoy en día aun cuenta con la
energía y vitalidad necesaria para subir caminando a la cumbre más alta del
Ecuador , un búsqueda de bloques de hielo
Con un andar más pausado, debido a su edad cada semana emprende una o
dos expediciones que le toman de 4 a 5 horas: tan solo para llegar a la mina de
hielos de Chimborazo, ubicada a casi 5000 metros de altura sobre el nivel del
mar
Tiempo atrás hasta un centenar de hieleros escalaban el Chimborazo. Los
hacendados españoles enviaban a los indígenas para buscar hielo del glaciar,
con la finalidad de mantener frescos los alimentos. Los hieleros aprovechaban
y se liberaban por unas horas de la opresión de la hacienda. Su profesión en
otros tiempos fue además muy importante para el comercio, especialmente
entre la Costa y la Sierra. Gracias al hielo que se obtenía del Chimborazo, los
mariscos podían llegar frescos a la zona de los Andes. Cada bloque de hielo
tarda casi una semana en derretirse por completo, por lo que se garantizaba la
frescura de los productos.
Hoy en día la profesión de hielero está al borde de la extinción, pues las
fábricas, las neveras y los refrigerados, proveen el hielo necesario para
comerciantes e incluso para los hogares. Esto ha rezagado su profesión, al
punto en que su hielo es usado únicamente en el mercado de Riobamba por
muy pocos comerciantes para la elaboración de batidos con frutas locales.
A esto se le suma la muerte de algunos de sus compañeros hieleros, mientras
que otros abandonaron la profesión para encontrar oficios menos riesgosos,
más cercanos y sobretodo lucrativo. Baltazar se encuentra solo ante la