demuestran que las mujeres pueden
encontrar una voz y una independencia a través de su involucramiento en
las actividades turísticas, al ser parte
de los procesos de toma de decisión.
Siendo el turismo sexual el ejemplo
más negativo y prominente, hay una
cantidad significativa de objetificación
sexual de las mujeres que trabajan en
la industria del turismo. Los estudios
han demostrado que se espera que
las mujeres se vistan de manera
“atractiva” que se vean hermosas
,
(esto es, delgada, jóvenes, bonitas)
y que “sigan el juego” con el acoso
sexual de los clientes. En muchos
casos, las imágenes estereotipadas
de las mujeres son parte del producto
turístico. Se presentan mujeres amigables sonrientes, que se ajustan a ciertos patrones de atractivo, que parecen
estar esperando para servir sumisamente a cualquier deseo de los clientes y se ve aún más reflejado en este
tipo de concursos donde pareciera que
sólo la belleza es lo único importante.
Por estas razones Asetur crea desde
hace cuatro años el Certamen BELLEZA TURISTICA PUEBLA. Cada año
este evento ha motivado a jóvenes universitarias no sólo para encontrase a
sí mismas y reconocer sus fortalezas
sino también para aumentar su autoestima, se les prepara en el mundo
del modelaje, proyección de imagen
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