Aprendemos Geometría con GeoGebra | Page 5

La geometría aparece en los currículos actuales de educación matemática con renovado vigor, sin embargo éste no se transmite en su enseñanza en las aulas. Las herramientas informáticas con que se cuenta en la actualidad sin duda suponen una excelente ayuda para los docentes. Por ejemplo, permiten ilustrar gráficamente la variación del comportamiento de algún objeto geométrico cuando se recorren los valores de cierto parámetro (algo que siempre acaba en un dibujo ininteligible cuando uno trata de hacerlo en la pizarra). El propósito de estas aplicaciones es intentar que incidan de forma directa en el proceso de enseñanza-aprendizaje que se desarrolla en el aula, aunque debemos tener en cuenta que la utilización de estas herramientas debe ir acompañada de un cambio de metodología en la que los alumnos sean partícipes del propio proyecto. Los programas de Geometría dinámica, como GeoGebra, han abierto nuevas posibilidades para la geometría escolar. La principal ventaja consiste en que las figuras dejan de ser estáticas, del papel saltan a la pantalla del ordenador. Ahora se nos presentan en forma de animaciones que nos permiten observarlas desde distintos puntos de vista e incluso nos permiten interactuar con ellas al modificar ciertas condiciones en el diseño y analizar qué es lo que ocurre. Los cambios en la enseñanza de la geometría son impuestos no sólo por las nuevas concepciones en los fundamentos de la geometría y por el empleo de metodologías apropiadas para la enseñanza, sino también por los cambios en las expectativas de la sociedad y por el cambio en las necesidades en los lugares de trabajo, unido al progreso de la ciencia y la tecnología. No se puede olvidar la creciente influencia de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) en todos los aspectos de la vida humana. Los ordenadores actuales cada vez más asequibles y el software desarrollado, cada día más potente, nos permiten alcanzar unos niveles de visualización impensables en otro momento. Algunos profesores objetan que lo que el alumno puede aprender a través del ordenador, también puede conseguirlo mediante métodos tradicionales; otros por el contrario, se muestran ciegamente partidarios de su uso generalizado. En mi opinión se trata de posturas demasiado radicales, no creo que deban ignorarse las posibilidades del ordenador como una herramienta potente al servicio del proceso educativo, como tampoco creo en su uso como sustituto de la enseñanza tradicional. El presente texto está dirigido a todos los docentes que decidan recurrir a esta maravillosa herramienta… Editado por alumnos del 4° año del ISFD N° 17, exclusivo para 4