ANTÁRTIDA EXTRATERRESTRE - EL INCREÍBLE CONTACTO DE ROSALÍA Antártida Extraterrestre | Page 16

ANDREA VICTORIA CANO
Fue la última foto que sacó su tío de Rosalía, y hasta los 13 años no le
volvieron a tomar más fotos, hasta que pareciera un ser humano
nuevamente, ¡a pesar de no haber estado en la guerra, había parecido
estarlo!, y sin embargo no se quejó, por el contrario, se río, porque según
Rosalía “Los Extraterrestres” le reforzaron el humor, sea por lo que sea y
tras todo lo vivido las palabras de Rosalía fueron: "No se puede estar
más de cincuenta años odiando, haciendo que los hijos que van
naciendo vayan engendrando odio hacia toda la humanidad, no
viven, ni dejan vivir y enseñarles a los hijos que deben odiar,
nunca olvidar y jamás perdonar. Eso no es honesto, privarlos de
querer al prójimo, sin cariño, sin amor, solamente vivir al
acecho, para pisarle la cabeza al prójimo, estafarlo, empeñarlo y
destruirlo, ¿No haber un poco de sentimientos caritativos?"
Sólo Rosalía rogaba y pedía que “ LOS SUPERIORES” la escucharan,
que terminara esa agonía, que sí debía pasar por esa prueba, terminara
en ese Milenio.
La casa donde vivía Rosalía
tenía tejido por los tres
lados, o sea que todos veían
el teatro y para colmo los
niños se juntaban en la
vereda, no sé si los
mandaban o por iniciativa
propia, pero se ponían a
gritar: “Qué la dejaran salir
a jugar”, y todos al unísono
gritaban: “ Qué la dejen,
EL VÍBORO Y LA PATA
qué la dejen” , ella no sabía
dónde esconderse, y su "abuelita" tenía ansias de cometer asesinato en
serie, todo un "poema".
En el fondo de la casa había un cañaveral, la caña por lo general tiene
las raíces casi afuera de la tierra y entre raíz y raíz se había hecho un
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