La obra narra la historia después de que el Dr. Frankenstein había creado a su monstruo, a quien los habitantes del pueblo creían muerto, pero se equivocaron. Posteriormente es obligado a hacer cirugías estéticas, con la señorita Fitch haciéndole la vida imposible, teniendo una vida miserable, hasta que llega su amada, Lizzy, lo cual desencadena una serie de sucesos poco convenientes para el doctor. Bajo la promesa no obedecida el doctor crea un monstruo perfecto en forma de mujer, para demostrar que no importa el exterior si no lo que somos por dentro, pero ¿Ésta creación sería la novia de Frankenstein, o lo sería Lizzy? En cuanto a la crítica, se puede decir que no es tan seria como se esperaba que fuera, sin embargo si tuvo el contenido necesario para dar a entender de manera general la novela. A continuación se analizará por qué lo mencionado tiene una razón de ser. Ciertamente la novela tiene cierto tema que exponía seriedad, pero la obra, marcaba cierta tonalidad divertida, remarcando los aspectos más cómicos, con chistes rápidos y simples, desde juegos de palabras, hasta burlas a los otros personajes. Probablemente, si le hubieran dado más seriedad a la obra, no hubiera sido de gran interés, ya que mucha gente carece de sentido de apreciación de arte, y prefieren ver cosas divertidas, pero para el público “conocedor” si fue como una falta de respeto. Fuera de este aspecto no favorable, la obra tuvo una muy buena estructura, un hecho elemental de la novela, seguido de una pieza musical alusiva a la ocasión. Estaban los personajes principales, como Dr. Frankenstein y Lizzy; y secundarios, como Franky, la señorita Fitch, Eva y el carismático vasallo Igor.