Más Allá Del Bien y el Mal
Monedas:
Esta primera moneda que estoy lanzando es una edicion especial de una serie de siete. Esta la hice estrictamente para tu protección. Tiene un candado y mi sello es la llave. La hice con mucho amor para ti y lleva toda mi hechicería que Dios me dio cuando yo nací. Solo se que los amo!
Osos:
Desde que yo nací me fascinaban los osos. Papa me hizo una colección de madera. Me han dado tanto éxito que lo comparto con ustedes. Están inyectados por mi de toda la energía que muevo. Sus propiedades: protección a los niños, casas, empresas, oficinas, carros y todo lo que sea eléctrico y positivo. Solo se que los amo!
Su nombre viene precedido y respaldado por un antiguo mito del cual eventualmente derivan las conocidas facultades de “LA PITIA”, custodia del ombligo de la tierra “El Onfalo”, sagrada piedra umbilical que se erguía en el templo de Apolo en Delfos. EVENIA. Su homónimo fue el pastor de los ganados del sol y en un leve descuido permitió el robo de los toros sagrados. Debía ser castigado, más siendo el bien amado del Dios, a cambio de perder el Don de la vista, recibió el preciadísimo don de la clarividencia. Esta bella metáfora del mito nos habla de lo efímero de la visión presente y objetiva, y de lo profundo e inescrutable de la visión interior, inminente y subjetiva. Nos habla de un privilegio que el hado concede a muy pocos y cuya posesión implica prudencia, sabiduría y discreción.
Los resultados hablan por sí solos, pero es referencia perentoria y necesaria para definir a Evenia, entender un estado de conciencia que por su exclusividad y precisión, a través de no importa qué vehículo o instrumento, penetra en nuestras más íntimas realidades. Esa luz, la luz que FEBO al nacer confirió a sus Diosas nutricias en Delos, y a EVENIO cuando le quitó la visión terrena, renace en “LA RENGIFO” cuyo nombre inicial aún habita en remotas Islas del misterioso ponto de la Hélade.
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@eveniarengifo