gemela, una media naranja. Todo lo que se necesita, según estas películas es que la
coincidencia los haga encontrarse.
Puede que estés en una congestionada calle en alguna situación complicada, y tu
alma gemela correrá a salvarte. Puedes estar esperando por un café en alguna
tienda en Paris, darte la vuelta, y toparte con el amor de tu vida. Una vez que la
pareja perfecta se encuentra, el mito entra en acción, reconociendo que son
perfectos el uno para el otro. Aún si el hombre y la mujer tienen sus diferencias al
inicio, o debaten si ellos son el uno para el otro, ya se sabe que por el contexto del
libro o de la película, ellos terminarán estando juntos.
Así es como funciona el romance… en el mundo de la fantasía.
En el mundo real, nunca tenemos certeza de cómo lo es o de cómo será. De hecho,
vas a descubrir que conforme avances en las citas, no existirá una persona perfecta
para ti. En cambio, existe gran cantidad de gente extraordinaria, y cada una de
esas personas pueden ser una pareja compatible contigo, si todos los elementos
se dan y si ambos así lo desean.
He conocido muchas parejas que dicen que su decisión de casarse no les tomó
mucho tiempo ni razones para hacerlo; ellos simplemente sabían que eran uno
para el otro. Incluso cuando les pregunté cómo supieron que eran el uno para el
otro, contestaron: “solo lo supimos”. Esto quiere decir que no importó el momento
en que se conocieron, ni cuánto tiempo llevaban conociéndose, pero en algún
punto de su relación todo empezó a fluir naturalmente y el amor fue evidente.
Es muy fácil decir que ellos sabían que eran una para el otro, sin embargo esto no
les garantiza que la relación vaya a durar.
10 años después, la mitad de las parejas que dijeron que sabían qu e eran el uno
para el otro, terminan en el divorcio.
Tu empeño, tu dedicación y tu trabajo para que la relación funcione va a
influenciar en si la relación dura o no, mucho más a que si te dedicas a encontrar
las razones por las cuales esa persona es la indicada o “el elegido”.