Agenda Cultural UdeA - Año 2008 DICIEMBRE | Page 25

ISBN 0124-0854
N º 150 Diciembre 2008

Novena

Héctor Abad Faciolince
“ A nuestras almas”
Está vivo. El alma es eso, lo que lo mantiene vivo. Si se cayera por un precipicio, si un trocito de plomo le horadara la sien, si no volviera a haber agua ni arroz, él ya no tendría alma nunca más. El alma es lo que nos permite pensar, recordar las palabras de la novena, y también lo que nos mantiene la esperanza de que quizás dentro de poco todo sea mejor. Como antes. Mejor que antes. En diciembre, después de la novena, había fritanga para todos los que iban, y de postre natilla con buñuelos, y sobre los buñuelos un chorrito de miel con azahar. ¡ Qué hambre! Sólo un poco de agua y de arroz ahumado en las cuencas de las manos, nada más. Lo que hay de la niñez a la juventud es un instante, de la juventud a la muerte ni se diga. A los pocos meses ya está grande el Niño Dios, y en la última cena. Soportar un calvario sin comida, caminar con las carnes desagarradas por las espinas, los insultos y los cardos. Barbado, flaco, deshecho. Así lo encontrarían, si alguien se ganara el premio, como si en vez de esconder al niño, hubieran escondido un
Nazareno. Está hecho un Nazareno, diría la abuelita, si lo viera. ¿ Y a éstos? Que los perdonen, porque no saben lo que hacen. Pero nadie los va a perdonar. Ellos lo dicen: " Si nos encuentran, hermano, todos sabemos lo que nos va a pasar ". Todas las almas colgando de un hilito, y todos tan apegados a las almas. Un punto rojo se mece en las nubes invisibles de la noche. ¡ Un globo, un mensajero! También de los globos, a veces, colgado de un hilito venía un mensaje, o un billete de aguinaldo. Pero nadie va a salir corriendo a coger ese globo. Se mira las manos y sabe que no podría cogerlo, aunque quisiera, con ese alambre que le aprieta las muñecas, el mismo tipo de alambre con que amarraban la mecha antes de elevar el globo. El globo carga con la mecha como nosotros cargamos con estas almas que no se resignan a dejar de palpitar. [... ]
" No tardes tanto "
Ya han pasado los días de la novena, y no llega. Hemos repetido todas las tardes nuestra cantinela, pero nadie viene. Se tarda. De