ISBN 0124-0854
N º 31 Febrero de 1998
Más allá del carné de periodista
A propósito del día del periodista que se celebra el 9 de este mes Agenda Cultural publica el siguiente texto de Gonzalo Medina Pérez , profesor del Departamento de Comunicación Social de la Universidad de Antioquia .
Q ué bueno sería si este 9 de febrero próximo , las agremiaciones periodísticas hicieran una tregua en el ceremonial propio de cada año , en el que se deposita la corona de laureles en el monumento a Manuel del Socorro Rodríguez , en el que se condecora a los colegas veteranos , en el que se emite una declaración de defensa de la profesión y en el que también los “ lagartos ” tienen la oportunidad de beber gratis a costa de cualquier empresa licorera . Qué bueno sería , digo , si al lado de estos actos , se retornara una reflexión , sin abandonarla , que nos permitiera fijar una posición más real sobre el periodismo como profesión y en especial sobre la tarjeta que se entrega hace veintitrés años . Porque cada vez es más evidente que lo importante no es tener el documento que acredita a una persona como periodista , si ésta no responde a las exigencias de la profesión y en este caso de la ciudadanía , como destinataria de nuestro trabajo . No faltan quienes se sienten periodistas porque poseen una tarjeta profesional , pero no ejercen el periodismo o lo hacen a medias en cuanto a calidad y a compromiso . Me estoy refiriendo entonces a quienes no tienen la vocación que demanda la profesión , a pesar de que cursaron una
carrera universitaria y que el Ministerio de Educación los faculta para trabajar . Me refiero a los colegas que hoy realizan actividades alejadas del periodismo como manejar taxi , administrar negocios particulares o comercializar artesanías , y que pareciera no hacerles falta el ejercicio de la profesión . A la par de esa situación , asistimos a casos , como por ejemplo el de Antanas Mockus , en los que profesionales de otras disciplinas son impedidos de actuar como periodistas por el hecho de no tener tarjeta , a pesar de comprobarse la calidad y capacidad para desenvolverse como reporteros -la experiencia con Alfredo Molano es más que evidente- . Por eso , algunas agremiaciones como el Círculo de Periodistas de Bogotá optaron por desautorizar a Mockus como periodista , antes que pensar en el beneficio que produce al usuario de información el trabajo del ex alcalde de Bogotá . En Panamá , una agremiación periodística de ese país le dio prelación al carácter de extranjero que tenía el periodista peruano Gustavo Gorriti , antes que a la defensa del derecho a la información , a raíz de la medida gubernamental de deportarlo como represalia por las denuncias