ASOCIACION DE OFICIALES DE LAS FUERZAS ARMADAS Y POLICIA NACIONAL DEL PERU
“Solo juzga bien aquel que pesa y compara, y cuando su voz
ha de pronunciar la sentencia más dura, no abandona la
caridad”.
Había una vez
Había una vez cuatro individuos que se llamaban: Todo el
mundo, Alguien, Cada uno y Nadie…
Había un importante trabajo que hacer, y se pidió a Todo el
mundo hacerlo.
Todo el mundo estaba seguro que Alguien lo iba a hacer.
Cada uno podía haberlo hecho, pero en realidad Nadie
lo hizo. Alguien se enojó porque el trabajo era de Todo el
mundo, pero Todo el mundo pensó que Cada uno podía
hacerlo y Nadie dudaba que Alguien lo hiciera.
A fin de cuentas. Todo el mundo hizo reproches a Cada uno
porque Nadie había hecho lo que Alguien podía hacer.
MORALEJA:
Si se quiere hacer reproches a Todo el mundo, sería muy
bueno que Cada uno haga lo que se debe hacer, sin tener
la esperanza que Alguien lo hará en su lugar, porque la
experiencia muestra que, cuando se espera a Alguien,
generalmente no se encuentra a Nadie.
CONCLUSIÓN.
Voy a transferir ese mensaje a Todo el mundo con el fin que
Cada uno puede enviarlo a Alguien sin olvidar a Nadie…
Colaboración: Jesús Valencia.
| 18 | ADOFAIP | Enero - Febrero | 2013