• Aumentan la eficiencia de la absorción nutricional por las plantas, al tener éstas
un mayor desarrollo en el volumen del sistema radical.
• Finalmente, las plantas cultivadas son sanas y vigorosas y no se enferman
fácilmente porque están naturalmente protegidas por el equilibrio nutricional
inherente a la presencia de hormonas, vitaminas, catalizadores y enzimas
vegetales en función de la constante actividad fisiológica, la cual es respaldada
por las condiciones de la nutrición orgánica que el abono orgánico fermentado les
ofrece a los vegetales y al suelo.