Primero, los inmigrantes deben obtener un pasaporte válido porque muchos procesos de inmigración, como la autorización de empleo, requieren una copia de los pasaportes como prueba para obtener un beneficio.
A continuación, los inmigrantes indocumentados deben obtener una licencia de conducir si están legalmente autorizados a hacerlo en su estado. Estas licencias de conducir evitarán que sean condenados o acusados por el delito menor de conducir sin licencia con agravantes, lo que podría quitarles la capacidad de demostrar un buen carácter moral en los procedimientos de deportación.
Tercero, los inmigrantes deben pagar impuestos atrasados para obtener la residencia en el futuro; en especial porque muchos casos actualmente en remoción están siendo desestimados y es posible que puedan argumentar la cancelación en el futuro.
En cuarto lugar, los inmigrantes no deben beber y conducir porque pueden ser colocados en procedimientos de deportación y deportados automáticamente si tienen dos DWI en diez años.
Finalmente, los inmigrantes necesitan anular condenas penales antiguas, si es posible, porque los cambios en las leyes penales de Nueva York ahora pueden permitir que algunos casos sean anulados legalmente y, por lo tanto, ayudar a su estatus migratorio.